En 1983 hubo una canción que llegó bastante lejos dentro de las listas inglesas, “Rip It Up”, canción de la hoy olvidada banda escocesa Orange Juice; en ese momento Inglaterra y sus charts gozaban, como también lo hace hoy y lo hizo casi siempre, de muy buena salud musical. Edwyn Collins, fundador de la banda y miembro estable hasta el día de su separación en 1985, primero hace un prototipo de banda, una bandita punky, “Nu Sonic”, con la cual no consigue más que sacarse el mono de tocar y hacer un poco de ruido, pero después de unos meses se toma de enserio esto de hacer música y forma Orange Juice, la banda que le dio ese éxito prematuro y efímero a la vez, pero éxito al fin.
La mezcla que Edwyn Collins proponía era tentadora, y lo hacía mezclando el sonido de Adam and the Ants, y la garganta de Morrissey –dos contemporáneos a Collins-. Con esos dos ingredientes, Collins, dejó atrás su primer proyecto punk para darle comienzo a un sonido más pop, una banda que andaba por los bares de Escocia con ganas de pedir pista dentro de la escena musical de los ’80. Orange Juice sonaba lindo, y además de tener melodías tentadoras y bien formadas, cuando sobaban tenían la capacidad de meter dentro del cuerpo de uno esas ganas de mover el pie y la cabeza al mismo tiempo, todo esto mientras se revuelve un Campari, y se pispea sobre el hombre las piernas de alguna chica que baila sola. Antes de que Collins salte al éxito con su temita popero, se queda sin batero –¿por qué los baterista siempre tienen que joderlo todo?-, pero esto no era un problema para Collins, porque en pocos días se le sentó detrás de la batería un negro –vaya uno a saber de dónde lo sacó, ¿no?- que además de tocar muy bien, le metió un toque de funk a la banda y dejó el temita hecho una joya recién pulida. Listo, estaba todo perfecto hasta ahí: el tema era un éxito, sonaba en Escocia, Inglaterra, en todas las radios.
Collins lo tenía todo en un puño –o eso parecía-, pero lamentablemente, como desde el inicio de la banda, Orange Juice, sufría constantes fluctuaciones: gente que iba y venía, problemas con la discográfica por el temperamento de Collins, y blah blah blah. Con un par de cambios dentro de la formación, Orange grabó otro disco, un disco que no logró nada, o sí, logró que la compañía de discos que los grababa, les diga: “Hasta acá llegamos, muchachos, todo muy lindo, pero esto no vende y es un fiasco”. Acto seguido, Orange se separa y cada uno por su lado. Pero Collins no se da por vencido, y arma una carrera solista bastante digna, y adivinen que: Collins pega otro tema bien ganchero y para la radio, sí, Collins es un hueso duro de quebrar y graba el tema “A Girl Like You”, que fue éxito en EE.UU., Inglaterra y España. Llegamos al final y a una conclusión que después de leer esto ya es un axioma: Collins es un tipo de un tema y nada más, como muchas bandas de los ’80, pero la verdad que vale la pena esperar ese tema, porque por suerte este muchacho siempre da en el clavo. Una más, Collins, una más y no jodemos más.
Orange Juice – Rip It Up
1982 – Polydor
01. Rip It Up
02. A Million Pleading Faces
03. Mud In Your Eye
04. Turn Away
05. Breakfast Time
06. I Can’t Help Myself
07. Flesh Of My Flesh
08. Louise Louise
09. Hokoyo
10. Tenter Hook