El domingo 21 de septiembre, el Festival Mutante celebrará su cuarta edición en C Art Media con una reunión de artistas jóvenes que vienen de lugares similares y con la misma premisa: vivir la música con pasión. Antes de la fecha, Winona Riders, Buenos Vampiros, Lagrimitas, Máze y El Nota hablaron con Indie Hoy sobre su concepción de la libertad artística y lo que significa ser independiente.
Winona Riders: “Siempre hicimos lo que quisimos”
“Si por independiente consideramos que todas las decisiones sobre la banda son nuestras sin que nadie nos tenga que decir qué hacer, entonces sí: somos una banda independiente”, dice Santiago Vidiri, bajista.
En tan solo seis años, desde el oeste de la provincia de Buenos Aires, Winona Riders editó tres discos, tocaron en lugares para veinte personas y también para casi cinco mil en el mítico Estadio Obras en un show que se hizo viral por haber durado cuatro horas. Gracias a un discurso y actitud sin tintas medias, generaron un público ferviente como sus canciones en vivo. Su último disco, No hagas que me arrepienta, estuvo seleccionado como uno de los mejores del 2024 para Indie Hoy.
Desde afuera, todos los sucesos parecen haber ocurrido con velocidad, pero ellos viven el presente. “El consumo de la gente no es el mismo que el de hace 20 años, todo pasa rápido”, dice el guitarrista Ricardo Morales. “Hay otros ejemplos de bandas que de un día para el otro están tocando en microestadios. Por suerte, nosotros tuvimos un crecimiento bastante escalonado y no nos salteamos ninguna etapa”.

La banda cuenta con el apoyo de Indie Folks, una productora de recitales que fue mutando y se convirtió en un sostén fundamental para el desarrollo de artistas emergentes. “El sello es una herramienta más, un brazo más de la banda. No hay discrepancias en los ideales. Tenemos el control de todo. Somos una banda independiente, siempre hicimos lo que quisimos”, añade Ricardo.
Desde su perspectiva, el grupo no cambió respecto a los primeros momentos. “Al tener la posibilidad de girar todo el tiempo y conocer nuevos escenarios, la idea de ser la banda chica que toca en esos lugares va a estar siempre”, reflexiona Gabriel Carabajal, percusionista.
Buenos Vampiros: “Siempre tuvimos la energía para salir a tocar donde sea”
“Ser independiente es poder tomar decisiones propias desde el núcleo de la banda”, sostiene Irina Tuma, cantante y guitarrista de Buenos Vampiros. “Formamos parte de dos sellos, Casa del Puente Discos y Spinda Records, porque nos sentimos identificados, ya que se manejan de la misma forma que nosotros”.
El grupo proveniente de Mar del Plata, comenzó su camino antes de la ya lejana pandemia con Paranormal (2019). Para darse a conocer, tocaban todos los fines de semana en la costa bonaerense. Con el paso del tiempo, demostraron ser la prueba fehaciente de que no hace falta vivir en Capital Federal para crecer. “Siempre tuvimos la energía para salir a tocar donde sea. Lo que más nos interesa es viajar con nuestra música”, reflexiona Irina.
Luego de editar Entre sombras (2024), la banda realizó dos de sus giras más importantes este año, una por Europa y otra por el interior del país. El tour por el viejo continente fue una experiencia novedosa para ellos, ya que durante dos meses giraron sin descansar, con el acompañamiento de bandas de Barcelona como Tetas Frías y Sistema de Entretenimiento. “Fue como ser parte de un circo” dice Irina. “Todas las noches estábamos en una ciudad distinta, armábamos el backline, tocábamos, y nos subíamos a la camioneta para ir a otro lado. Estás yendo a defender lo tuyo en un país donde no hablan tu idioma y no te conocen”.
Buenos Vampiros mantiene las mismas premisas para el futuro: seguir escribiendo canciones y tocando. Los mueve la experiencia y están en constante movimiento para construir lazos a través de la música. “Es importante girar con otras bandas que están en la misma que vos”, dice Irina. “Esos van a ser los recuerdos que nos vamos a llevar por siempre, las personas que conocimos dentro del ambiente punk, no solo por lo musical sino por la manera de moverse”.
Lagrimitas: “Le ofrecemos a la escena un ejemplo visible de minas en el escenario”
“Somos una banda independiente. Nadie nos dice cómo tenemos que componer y cómo hacer nuestras canciones, que es la materia prima del grupo”, dice Taly Salas, guitarrista. “Es un fenómeno de la música argentina, es muy difícil no ser independiente, te tenés que hacer de abajo en todo lo que pertenece al arte”, agrega Josefina Martorell, cantante.
En tan solo dos años, y con un puñado de canciones de estudio, Lagrimitas es un grupo formado por cuatro mujeres que se hizo un lugar en la escena a través de un punk rock sin vueltas y al mismo tiempo con una teatralidad que no les impide mostrarse con autenticidad en el escenario. “Le ofrecemos a la escena un ejemplo visible de minas en el escenario, una puerta que se nos abrió gracias a otras bandas que pasaron por lo mismo”, reflexiona Taly. “Simplemente hacemos lo que nos gusta y eso es suficiente para que la gente lo vea como algo tangible de que puede suceder”.

El año pasado en este mismo festival, tocaron Las Tussi, otra banda formada íntegramente por mujeres y con el punk como estandarte tanto musical como ideológico. “Cualquier género puede adaptarse al término independiente, sin necesariamente tener una etiqueta. Por el contexto en el que estamos y por la historia del punk, creo que se lo determina un poco a este género. Está salido de toda norma y sostenido por gente que apoya determinadas causas políticas”, sostiene Taly.
Máze: “Nos une ser genuinos”
“Para mí ser independiente significa valerte por tus propios medios, poner todo de uno para no depender de discográficas que te bajen una editorial”, dice Santiago Mazzeo, vocalista de Máze. “No creo que lo seamos del todo, porque dependemos del público, de que nos quieran escuchar y de su interés genuino”.
Al igual que otras bandas del festival, todavía no lanzaron un disco, sino EPs y singles, suficientes para ganarse el cariño del público que responde con euforia a los estribillos emocionales. “Yo fui oyente de Máze antes de entrar a la banda. Hay una sinceridad en las letras, en la música, en la forma de utilizar las palabras que es muy llamativa”, agrega Paloma Prime, bajista del grupo.
Las letras viscerales y la pasión desgarradora de la voz puede que sean coincidencias entre las bandas del Festival Mutante. También podría ser que la mayoría de los músicos no nacieron en Capital Federal e incluso tienen a la zona oeste de la provincia de Buenos Aires como un lugar de arraigo. “Nos une ser genuinos, sin escudarse en la postura de artista que tiende a ser pretenciosa. Manejamos una estética, formas y modismos, pero siempre con ganas de impregnar las verdades que tenemos para decir”, reflexiona Santiago.

Máze utiliza en sus portadas artísticas billetes y monedas nacionales que evocan situaciones (y precios) que remiten a otra época. “La búsqueda de la estética es nostálgica y tangible. Se trata de recordar valores y sentirlos. Se dio de pura casualidad, poniendo un billete y una camisa en un scanner”, admite Mazzeo.
El EP Un invento (2025) tiene viejas composiciones de Santiago. Son muy personales: solamente su voz y una guitarra acústica, tan íntimas que prefiere no hablar de ellas. En el futuro primer disco de Máze habrá lugar para este tipo de composiciones, pero también para el rock enérgico y emocional de canciones como “¿Quién?”. “Hacer un disco implica una logística importante, dejar de tocar y tener recursos económicos. Nosotros crecimos escuchando discos, nos gusta, le damos importancia a la coherencia de temas, no es lo mismo que escuchar temas sueltos”, dice Paloma. “Lo que ya mostramos y estamos por subir, todo es un gran capítulo piloto de una serie”, cierra Santiago.
El Nota: “Antes éramos independientes, ahora cambió”
“Para mí no somos una banda independiente. Vamos a sacar un disco con un sello atrás y estamos en un festival con sponsors y cobertura de prensa” sostiene Nazareno Nota, más conocido como El Nota. “Para mí, ser independiente está atado al hazlo tú mismo y la marginalidad del punk rock. No estoy desprestigiando lo que hacemos: antes éramos independientes, ahora cambió”.
Nazareno sigue reflexionando sobre el concepto de ser artista independiente, para él, una vez que hay un sello de por medio, la banda pasa a ser un grupo de trabajo que trabaja en conjunto con otros grupos. “Es un ecosistema corporativo pequeño y mediano pero corporativo al fin y al cabo”, afirma El Nota.
No siempre hubo tantas personas en el proyecto, pero la sinceridad y la visceralidad siempre estuvo ahí. En la página de Bandcamp de su disco Demos de odio, tristeza y arrepentimiento (2017), describe a sus canciones como simples y con letras “pedorras”, pero aprobadas por sus amigos. La semana pasada lanzó su primer disco de estudio, Subidos al pony, editado por Hora Cero Records, en donde combina humor, narrativa y crudeza para consolidarse como una de las voces más llamativas de la nueva generación.
“Las letras tienen su encanto. Es algo muy personal para mí. Intento estar de acuerdo con las cosas que digo y si eso le llega a la gente, perfecto. Además, la banda suena muy bien, ensayamos mucho, no solo se queda en la poesía”, agrega sobre el show en vivo, que se ganó los elogios no solo de la gente sino de sus propios colegas. El Nota devuelve el afecto y habla con cariño de sus compañeros de festival, con los cuales comparte desde una canción hasta jugar a la pelota. “Nos une la generación. Somos bandas que son una especie de moda alternativa. Nos tocó a nosotros y vamos a disfrutar que hay tantas bandas con guitarras distorsionadas”, reflexiona Nazareno.

Winona Riders, Buenos Vampiros, Lagrimitas, Máze y El Nota se presentan el domingo 21 de septiembre desde las 17 h en el festival Mutante en C Art Media (Av. Corrientes 6271, CABA). Entradas disponibles a través de Passline, 20% de descuento para socios de la Comunidad Indie Hoy.