En la historia del rock no todo fue talento y originalidad. Muchas de las canciones más icónicas de la música popular ocultan ciertas polémicas por supuestos plagios, demandas judiciales y acuerdos fuera de los tribunales. Desde simples “inspiraciones” demasiado evidentes hasta copias casi calcadas de otros temas, varios artistas consagrados fueron acusados de apropiarse de melodías, letras o arreglos ajenos. Por eso, hoy queremos repasar 10 casos emblemáticos.
The Beach Boys – “Surfin’ USA” (1963)
El hit que lanzó a los Beach Boys al estrellato fue en realidad una adaptación no autorizada de “Sweet Little Sixteen” de Chuck Berry, quien demandó a Brian Wilson y los suyos, y fue acreditado como coautor del track, además de recibir las regalías por la canción.
The Beatles – “All My Loving” (1963)
Aunque no enfrentó juicios, “All My Loving” fue señalada por críticos y músicos como demasiado similar en estructura a estándares previos del pop y del country. Se discutió especialmente su parecido rítmico con canciones de The Crickets, lo que alimentó sospechas de copia indirecta en los primeros años del grupo. Además, se hizo foco en su parecido con "Kathy's Waltz" de Dave Brubeck Quartet.
Bob Dylan – “Blowin’ in the Wind” (1963)
Bob Dylan fue acusado de basarse en la antigua canción antiesclavista “No More Auction Block for Me”, interpretada en comunidades negras desde el siglo XIX. Si bien nunca enfrentó un juicio formal, estudiosos y músicos señalaron la similitud de la melodía.
The Who – “Zoot Suit” (1964)
Publicado bajo el nombre The High Numbers (primer seudónimo de The Who), “Zoot Suit” tenía una melodía casi idéntica a “Misery” de The Dynamics. La falta de originalidad fue tan evidente que la pista pasó desapercibida en listas, pero quedó marcada como un ejemplo de apropiación.
The Doors – “Hello, I Love You” (1968)
Este sencillo, que llegó a la cima del Billboard Hot 100, fue acusado de plagiar “All Day and All of the Night” de The Kinks. De hecho, Ray Davies, guitarrista, denunció el parecido en la línea de guitarra, pero el caso no llegó a los tribunales en su momento.
Deep Purple – “Child in Time” (1970)
El track de 10 minutos incluido en Deep Purple in Rock se parece notablemente a ”Bombay Calling” de la banda de rock psicodélico It’s a Beautiful Day. De hecho, Jon Lord reconoció la inspiración, pero el grupo nunca dio los créditos oficiales. En una especie de “venganza”, It’s a Beautiful Day grabó luego una versión de “Wring That Neck” de Deep Purple.
George Harrison – “My Sweet Lord” (1970)
George Harrison fue demandado por plagio debido a las similitudes con “He’s So Fine” de The Chiffons. En 1976, un tribunal estadounidense dictaminó que el ex Beatle había cometido “plagio inconsciente”. El caso se convirtió en uno de los juicios más famosos de la música y el de Liverpool terminó pagando más de 500 mil dólares en indemnización.
Led Zeppelin – “Stairway to Heaven” (1971)
La introducción de la canción más icónica de Led Zeppelin fue acusada de copiar “Taurus”, el instrumental de la banda Spirit de 1968. Tras varios juicios, en 2020 la Corte Suprema de EE.UU. cerró el caso a favor de Led Zeppelin, pero el debate sobre las similitudes musicales aún sigue vivo.
Pink Floyd – “Us and Them” (1973)
El álbum Gandharva de Beaver & Krause de 1971 incluye frases musicales que se repiten en "Us and Them". Además, el tema fue criticado por su parecido con la pieza instrumental "The Travel Sequence", compuesta en 1972 por la misma agrupación pero descartada, lo que llevó a algunos críticos y músicos a cuestionar si en realidad era una reelaboración que debería haber reconocido más créditos internos.
Eric Clapton – “Give Me Strength” (1974)
Louise King Mathews, compositora y cantante de góspel, afirmó que "Give Me Strength" era de su autoría y que la había escrito en 1939. Sin embargo, cuando Eric Clapton publicó su éxito de 1974 como parte de su segundo disco, 461 Ocean Boulevard, la artista tenía demasiados problemas económicos como para llevar el asunto a los tribunales.