Como la mayoría de las bandas de rock del siglo XX, The Beatles no incluyeron a mujeres en su historia musical. Por el contrario, las parejas de los Fab Four fueron objeto de crítica en muchas ocasiones: por infidelidades o por ser consideradas las “responsables” de la ruptura del grupo.
John, Paul, George y Ringo fueron los compositores e instrumentistas de sus canciones, aunque en varias oportunidades contaron con músicos invitados, sobre todo cuando los temas requerían cuerdas, vientos u otros instrumentos.
El pianista Billy Preston fue un colaborador frecuente, y también tuvo su lugar Eric Clapton, pero la presencia femenina parecía limitarse al rol de groupie, hasta que llegó la chelista Joy Hall, quien fue la primera mujer en tocar en un tema de The Beatles.

La música formó parte de "Strawberry Fields Forever", una de las canciones más reconocidas de la banda, en la que las cuerdas tienen un papel fundamental. Luego de ser la pionera, le siguió la arpista Sheila Bromberg, convocada para "She’s Leaving Home".
Si bien ninguna de las dos alcanzó la masividad y popularidad de The Beatles, pudieron preciarse de haber roto con el hermetismo masculino que caracterizó a una de las bandas más grandes de la historia y, en general, a la industria musical de la época.
La canción de The Beatles que hoy sería cancelable
Las letras de The Beatles no se caracterizaban por ser precisamente feministas, aunque tampoco puede decirse que la banda fuera un emblema de la construcción de la figura tradicional del macho. El amor, la política y las historias personales fueron algunas de las temáticas más recurrentes en sus discos. Sin embargo, el tema "Run for Your Life" contiene un mensaje que, con el avance de la sociedad, hoy no sería bien recibido por gran parte del público.
Esta canción no se encuentra entre las más destacadas de The Beatles, y una de las razones es su controvertida letra, en la que se amenaza de muerte a una mujer: “Mejor corre por tu vida, pequeña. Esconde tu cabeza en la arena, pequeña. Si te agarro con otro hombre, es el fin”. El tema, incluido en Rubber Soul, generó polémica incluso en su momento por frases como “preferiría verte muerta antes que con otro hombre, muchacha”. Lennon, su compositor, admitió luego que la odiaba, ya que había sido malinterpretada: según explicó, pretendía ser una parodia de Elvis Presley.