Como cualquier otra disciplina, la fotografía guarda un montón de secretos y tips que pueden ayudar tanto a novatos como a expertos a mejorar en su profesión.
En este caso, decidimos compartirte siete simples pero útiles consejos que podrían ayudarte a mejorar en este arte si es que hace poco empezaste a dar tus primeros pasos dentro del mundo de la fotografía. La lista fue confeccionada por los expertos de la agencia Magnum y podés ver la lista completa en este enlace.
Encontrá tu propia voz
El mejor trabajo fotográfico se siente como algo que no se ha visto antes, ya sea una historia, un estilo o un sentimiento que evoca. Al concebir un proyecto, hacete las preguntas difíciles sobre por qué elegiste esa historia: ¿Sos la mejor persona para contarla? ¿Qué estás agregando al género, o a la historia, que no se haya dicho o hecho antes? ¿Por qué te importa y cómo vas a hacer que las personas se interesen por eso? Date una ventaja y elegí el proyecto o el enfoque que te ayude a responder bien estas preguntas.
Entendé el contexto
Estudiá el trabajo de otros fotógrafos: los maestros y sus contemporáneos, leé teoría fotográfica y debates en internet, entendé cómo funciona la comunicación visual y la cultura, y el contexto más amplio en el que está haciendo y presentando el trabajo. No solo es interesante, sino que es la base para hacer narraciones informadas, relevantes y atractivas.
Sé vos
No creas que necesitás mostrarle a un cliente que podés hacer todo. Los clientes quieren ver claramente quién sos como fotógrafo; buscarán un estilo o enfoque que se adapte mejor al proyecto que tienen en mente. Todo fotógrafo emergente necesita tener un proyecto personal que muestre de lo que es capaz, que exprese de qué se trata su obra. Esto puede demorar años en desarrollarse, pero será la plataforma de lanzamiento para otras comisiones y ayudará a consolidar tu identidad individual como fotógrafo.
¡Hacé el trabajo!
Hacé el trabajo, luego dedicá tiempo a compartirlo, venderlo, promocionarlo, a participar en premiaciones, etc. No hay forma de sortear esta parte. Sentite cómodo con el hecho de que hacer un buen trabajo lleva tiempo. Cuando estás luchando con salir adelante, podés sentirte como una persona muy solitaria e ingrata. No te rindas y seguí con eso.
Andá donde está tu audiencia
La creación de un libro es una forma hermosa de llevar tu trabajo al mundo, pero no es la única. Preguntate: ¿Qué impacto querés que tenga tu trabajo? ¿Quién necesita verlo para tener este impacto? ¿Dónde están mirando? ¿Cómo podés llegar a ellos?
Construí una comunidad
La fotografía puede ser dura y solitaria. Construí una comunidad a tu alrededor. Comunicate con las personas cuyo trabajo te gusta en Instagram. Organizá un encuentro. Asistí a un taller. Sé generoso con tu tiempo e ideas: ayudá a otros y otros te ayudarán.
Expandí tu práctica
La fotografía es sólo una herramienta en un kit de narración. El cómo un público entiende y siente una historia está en tus manos. Ya sea una elección de marco para tu exposición, papel para tu libro, música para tu pieza multimedia y edición del texto que lo acompaña, cada elección que hagas es una oportunidad para hacer que el trabajo se destaque. Tu tarea no se limita a la cámara.