El aniversario número 25 de arteBA se festeja con todo en una nueva edición que obliga a los espectadores a detenerse en cada obra. Sin embargo, hemos descubierto dos joyas artísticas que los fanáticos de la música tienen la obligación de visitar.
“Vilna”
En el stand D30, dedicado íntegramente a la fotografía, puntualmente el retrato, los visitantes descubren una pequeña sala oscura y una bandeja de vinilos que bien podría ser de un “tétrico DJ” ya que los discos que se exhiben y que están colocados en sus equipos son nada menos que radiografías. Radiografías en las que explícitamente se ven los huesos de quienes fueron examinados. En esa pequeña habitación, suena de modo muy tenue una pieza de música experimental que remite a, quizás, pasillos susurrantes o algún material de archivo en mal estado o, voces que perdieron su forma humana. Sin dudas la instalación genera un clima escalofriante que despierta el interés en averiguar qué ocurre (u ocurrió).
Se trata de un proyecto de música experimental de la dupla Gabriel Valansi, artista visual, y el músico Sebastián Schachtel, compositor, productor y tecladista (para quienes los toma desprevenidos, Schachtel fue miembro de Clap, La Portuaria y actualmente Las Pelotas). Ambos se han interesado en una cuestión poco conocida, quizás, sobre cómo y dónde se escuchan los vinilos en plena Guerra Fría, en zonas con restricciones para el ingreso y salida de discos de artistas de países enemigos.
En ese periodo de mundo bipolar, alguien descubrió que las radiografías podían ser surcadas del mismo modo que los discos de vinilo y de esa forma ingresaban canciones a por ejemplo, la entonces, Unión Soviética. Así se escuchaba a Elvis, entre otros artistas: de “contrabando”.
En esta edición de arteBA, el dúo Valansi – Schachtel presenta Intro, obra a la que han definido como “una síntesis sonora de las ideas fuerza que dan sentido e identidad a Vilna como experiencia audiovisual: el sonido y la música utilizadas como forma de control y poder sobre las personas”. Se exhiben, entonces, cinco piezas radiográficas grabadas con el mismo método utilizado en la URSS para copiar “música prohibida”, que poseen introducciones a composiciones en su mayoría construida a partir de audios capturados durante la Guerra Fría: “textos cifrados, mensajes de disuasión, radios fantasmas, códigos en clave morse”, explica su manifiesto.
A su vez han presentado a estos cinco particulares “simples” en una edición similar a la de un disco quíntuple, con su caja negra, sus sobres particulares, su arte de tapa, etc. Y adelantan lo que serán sus cinco futuros larga duración.
En Vilna, Gabriel Valansi se ocupa en estas obras de sintetizadores, programación, guitarras, teletipos UBV-76 y Sebastián Schachtel de sintetizadores, sequencers, acordeón y programación.
“Bang, Bomb, Beat”
Avanzando hacia la sección principal “Especial Project”, un bombo de batería iluminado por luces de led, dispara un “Bang” en la cara del espectador. En una pared lateral detrás de esta obra, otro bombo vintage lanza un “Beat” y dentro del espacio, en plena oscuridad otro “tacho” lanza un “Bomb”. Los bombos colgados, fuera del cuerpo de la batería, fuera de un escenario o una sala de ensayo y despojados del sujeto a llamarse baterista, hablan. Cortan el silencio con maravillosas letras y luces que remiten a su sonido convencional y quizás autoritario.
Estas tres piezas corresponden a una obra inédita del artista chileno Iván Navarro, realizada especialmente para esta edición de arteBA, con tres bombos de batería vintage de edición limitada.
Más allá de la belleza de estas obras y la energía positiva que genera en los espectadores, éstas forman parte de la vasta producción del artista que trabaja con luces de neón (en general, no es el caso de estas obras traídas a Argentina) y llevan un importante mensaje en ellas: “Todas las piezas que he hecho hacen referencia a la actividad de control y la electricidad fue la forma de controlar a la gente”, ha afirmado.
Es que Navarro vivió la larga y pesada dictadura de Augusto Pinochet en Chile, por lo que este tema se vuelve recurrente en su trabajo que, sin dudas, ha encontrado una forma poco convencional de decir no a la violencia y de denunciar aquella época sombría e iluminar literalmente a las conciencias colectivas. “Bang”, “Beat” y “Bomb”, se vuelven en este sentido, onomatopeyas de disparos, en una época “Beat”, que detrás de sus colores y “raros peinados nuevos” ocultaba una oscuridad macabra que han vivido muchos países de Latinoamérica.
El joven artista chileno ha formado además, un sello discográfico underground en la ciudad de Nueva York, donde reside actualmente, y donde se expone su obra en galerías y espacios de gran relevancia. El sello lleva el nombre de Hueso, como si Navarro hubiese escuchado la misma historia que se ha contado al inicio de esta nota.
Para conocer los artistas que agrupa pueden ingresar al sitio oficial del sello.
Datos útiles:
arteBA se lleva a cabo en los pabellones azul y verde de La Rural (Avenida Sarmiento 2704, Buenos Aires) hasta el domingo 22 de mayo, de 14 a 21 hs. El valor de la entrada es de $160 por un día, mientras que el abono por 2 días tiene un valor de $250 y por 4 días de $320.
Las entradas se adquieren en boletería y hay descuentos del 50% para estudiantes y jubilados presentando la debida acreditación, también 2×1 con Club La Nación (cupo limitado) y 50% de descuento con tarjeta CITI.