Compartir vida diría que es lo más maravilloso del arte… y la muestra de Ronald Shakespear en la Biblioteca Nacional logra exactamente eso. Como una alarma que suena recordándonos sensaciones, en un discreto costado del hall de entrada se pueden observar los retratos del diseñador que, recién revividos de viejos negativos, traen al presente encuentros y pasajes.
El retrato más perfecto que he visto de Borges se acomoda entre los blanco y negros predominantes. Un Frondizi plácido, un Quino pensante, o un inquieto Orson Wells se vuelven secundarios ante el equilibrio entre la vehemencia y la discreta complicidad de Shakespear. Las texturas de su vieja Leica son hipnotizantes, y al contrastar con la certeza de su nueva Canon dan una exposición pequeña y cargada de vida. Pequeña y cargada de vida… justo como Ronald.
Afuera Buenos Aires se desliza, y la caminata por la explanada de la Biblioteca recuerda que en la ciudad, como en los viejos negativos de Shakespear, hay tanto que aguarda ser compartido.
Caras y Caritas. Fotos de Ronald Shakespear. Medio siglo después se puede visitar en la Sala Leopoldo Lugones de la Biblioteca Nacional hasta el 30 de agosto de lunes a viernes de 9 a 21 hs, y sábados y domingos de 12 a 19 hs.