Ya han pasado varios siglos desde la muerte del artista e inventor Leonardo da Vinci, pero los misterios detrás de sus creaciones todavía fascinan a muchos historiadores y científicos.
Además de todas las teorías en torno a la sonrisa de la Gioconda (La Mona Lisa); otra pintura suya que ha generado toda clase de hipótesis es “Salvator Mundi”, una obra que muestra a Jesucristo sosteniendo lo que parece ser una esfera de cristal.
Lo que desconcierta a muchos es que dicho objeto no presenta signos de refracción o reflejo del orbe. Por el contrario, se puede ver claramente a través de él las túnicas de Cristo sin ninguna clase de distorsión. En vista de los vastos conocimientos de da Vinci sobre física y propiedades de la luz, era muy poco probable que se hubiese equivocado al pintar la esfera.
La respuesta a ese enigma se encontró por un equipo de investigadores tras utilizar un renderizado 3D avanzado. Con ese método demostraron que la esfera es un orbe hueco. Al respecto de ese descubrimiento, los expertos en cuestión señalaron ante la prensa especializada:
“Nuestros experimentos muestran que una representación ópticamente precisa que coincide cualitativamente con la de la pintura es realmente posible usando ciertos materiales, fuentes de luz y conocimientos científicos disponibles para Leonardo da Vinci alrededor del año 1500. Este análisis indica que Leonardo comprendió estas propiedades ópticas de las esferas huecas y cómo evitar distraer las distorsiones ópticas del renderizado de los pliegues de la túnica del sujeto.”
Cabe mencionar que “Salvator Mundi” se registró por primera vez bajo el mandato del rey Carlos I (1600-1649). Después desapareció durante muchos años y en 2005 fue adquirida por una casa de subastas en Estados Unidos que pudo confirmar su autenticidad.