Dubstep, en pocas palabras, es un subgénero dentro de la música electrónica. Surge en Gran Bretaña en la segunda mitad de la década de los noventa y constituye la variante más oscura del 2-step al que se le aplican técnicas del Dub. Su popularidad ha ido in-crescendo debido a las ediciones de Hyperdub, sello londinense que en su catálogo cuenta con Kode 9 y también con su figura estrella: Burial. Recientemente Hyperdub entregó un nuevo simple y se trata de la canción “Kathy lee”, de la canadiense Jessy Lanza.
“Lee” sorprende desde la primera escucha, por ser distinto a la melancolía urbana de Burial y también al distópico Kode 9; porque “Kathy Lee” es un tema romántico, cuya letra trata sobre una mujer y no sobre un individuo alienado. Haciendo uso del lenguaje del dubstep, pero mezclado con la óptica romántico-femenina, el tema progresa en base a la dinámica propuesta por el dub: sustrayendo o sumando elementos. Para, a partir de la suma de estos, subir sutilmente sobre el final, mientras que una voz muy rosa y femenina, se va intercalando con las sonoridades, lo que vuelve a “Kathy Lee” aún más encantadora.
El tema tiene un mood relajado, remite a Flying Lotus o a XXYYXX, pero también a Grimes. Por ello la selección de sonidos presenta elementos hipnóticos vinculados al hypnagonic pop. Jezzy resume con “Kathy Lee” distintas tendencias, que se presentan disímiles, pero que juntas convergen y conviven en la blogósfera musical actual.
La canción es interesante porque, a pesar de ser un género muy de moda en la actualidad, existen pocos temas dubsteps realizados desde la óptica femenina. “Kathy Lee” es para bailarlo, su atmósfera es una pista de baile narcotizada por la voz de Lanza y, es por ello, un extraño souvenir del underground británico.