Así como en el mundo de Harry Potter existen tres maldiciones imperdonables que son penadas por el Ministerio de Magia, hay errores en la adaptación cinematográfica que van desde aceptables hasta inadmisibles para los llamados potterheads, fans de la saga.
A continuación un listado con los más interesantes equivocaciones.
#1: Empecemos marcando los errores u omisiones que no afectan demasiado al desarrollo de la trama. ¿Sabías que Dudley y Petunia, el primo y la tía de Harry (de parte de su mamá Lily), en realidad tienen el pelo rubio? ¿O por ejemplo que Albus Dumbledore conoció a los Dursley en el libro seis e incluso mantuvo una conversación casual con ellos? Nada de esto aparece en las adaptaciones.
#2: A los magos y brujas menores de edad, no se les permite utilizar magia fuera de Hogwarts, solo pueden hacerlo si se encuentran en peligro. Por ejemplo, en una de las primeras escenas de El prisionero de Azkaban, Harry utiliza el hechizo Lumus para leer un libro de noche en su habitación. Esto no sería posible, si lo hubiera hecho tendría que presentarse en el Ministerio de Magia por infringir la ley (tal como pasó en la película cinco). Cuando infló a su tía Marge, se lo perdonaron dado que querían protegerlo del supuesto criminal Sirius Black.
#3: En los libros, Harry es irreverente, no tiene pelos en la lengua y le hace frente a todos sin dudarlo (a sus tíos, a Snape, a quien sea). Ama leer y antes de comenzar el primer año en Hogwarts se había leído todos los libros al igual que Hermione. Además, es ambicioso y tiene muy buen sentido del humor. Esto lamentablemente no logra transmitirse del todo en las películas, y quienes no leyeron los libros se pierden esta parte de su personalidad. Por supuesto, nadie culpa a Daniel Radcliffe de esto ya que fue una decisión de los guionistas.
#4: Y el Quidditch… ¿dónde está? Hacia el final de la saga llama la atención la ausencia del Quidditch, el deporte más popular en el mundo mágico. Harry, Ron, Fred y George lo jugaban siempre en los veranos en los jardines de la Madriguera, reemplazando las pelotas oficiales por manzanas. Juego al que años después se sumó Ginny y hasta Hermione, a quien en las películas jamás vimos subirse a una escoba. Incluso Ginny en su vida adulta termina jugando profesionalmente para el equipo las Arpías de Holyhead.
#5: En las películas, nunca queda del todo claro cómo comenzó la relación entre Harry y Ginny, y por momentos parece un poco fría. En los libros se describe cómo ya eran muy buenos amigos antes de ser novios. La Weasley más chica estaba enamorada de Harry desde su primer año, pero era muy torpe y tímida en su presencia. Hasta que por un consejo de Hermione aprendió a relajarse y mostrar más su personalidad, lo que hizo que él se fijara más en ella. Su primer beso no fue en la Sala Multipropósitos como se muestra en El misterio del príncipe, sino que sucedió luego de que Gryffindor ganara la copa de Quidditch gracias a la actuación de Ginny como buscadora (evento que tampoco se aparece).
#6: El beso entre Hermione y Ron aparece en una muy buena escena de Las reliquias de la muerte, pero no es perfecta como en el libro. En la novela, en el medio de la batalla, Ron declara que deberían salvar a los elfos domésticos que cocinan todo lo que aparece mágicamente en el Gran Comedor. Hermione no puede creer lo que dice e inmediatamente salta a sus brazos y le da un beso. Ron deja caer los colmillos de basilisco que tenía en sus manos, que habían juntado para destruir los horrocruxes, y se lo devuelve con emoción. Harry los mira y reacciona diciendo: “Eh, que estamos en guerra”. A lo que Ron responde: “Con más razón. Es ahora o nunca”.
#7: En Las reliquias de la muerte, Draco continúa siendo secundado por sus amigos Crabbe y Goyle. Pero en la película, Vincent Crabbe no aparece y es reemplazado por otro Slytherin, Blaise Zabini (interpretado por Louis Cordice, un actor británico de ascendencia africana). Lo que sucedió fue que el actor original, Jamie Waylett, debido a unos inconvenientes con la ley no pudo continuar en el proyecto. Hay varios cambios de reparto en toda la saga pero este es uno de los más evidentes.
#8: Antes de que la batalla final mágica termine, Neville expresa que debe encontrar a Luna Lovegood para confesarle su amor, algo que nunca sucedió en el libro. De adulto, Neville se convierte en el profesor de Herbología de Hogwarts y se casa con Hannah Abbott, de Hufflepuff. Este se convirtió en un error que los fans dejaron pasar dado que provocó mucha ternura la idea de que Luna y Neville pudieran terminar juntos.
#9: Hay una falta de profundidad en las películas en relación al personaje Edward Lupin (alias Teddy), hijo de Nymphadora Tonks y Remus Lupin (ex profesor de Defensa contra las artes oscuras). Teddy representa en la saga algo muy importante: una nueva generación de magos y brujas que deben crecer sin sus padres, al igual que le pasó a Harry, porque murieron luchando en la Segunda Guerra Mágica. Dato de color: Teddy fue a Hufflepuff, como su mamá, y es ahijado de Harry Potter.
#10: ¿Harry tiene los mismos ojos que Lily? No, eso era una joda y quedó. Por mucho tiempo los personajes describen que el protagonista tiene exactamente los mismos ojos que su difunta madre, quien murió para salvarlo. Es decir, celestes (en el libro son de color verde). Hasta que en la última película, en un flashback, los ojos de Lily son… marrones. Sí, ¡marrones! ¿No podían ponerle unos lentes de contacto a la actriz? ¿O modificar el color de sus ojos en la edición? Este es sin duda uno de los peores errores de la adaptación cinematográfica, aunque dejó buenos memes.