Atención, amantes del cine y el entretenimiento: en el día de la fecha tenemos tres propuestas para ustedes. Se trata de un trío de largometrajes que pueden disfrutar en Netflix y que prometen hacerles pasar un gran rato, así como ya lo hicieron con miles y miles de personas que previamente les dieron play.
El stand de los besos 3
2021 - Dir: Vince Marcello
Tras los acontecimientos de El stand de los besos 2, esta tercera entrega nos sitúa en el verano, antes de que Elle (Joey King) vaya a la universidad. Ahora, la joven se volverá a ver obligada a elegir entre su mejor amigo, Lee Flynn (Joel Courtney), o el hermano de éste y el amor de su vida, Noah Flynn (Jacob Elordi). Elle tendrá que decidir si va con Lee a estudiar en Berkeley, cumpliendo la promesa que se hicieron, o ir a la universidad de Harvard junto a Noah, aceptando la propuesta de éste.
Vivo
2021 - Dir: Kirk De Micco
La historia sigue a un kinkajú que pasa su vida tocando música en una alegre plaza junto a su dueño Andrés. Un día, Andrés recibe una carta de la famosa Marta Sandoval en la que invita a su viejo amigo a su concierto de despedida con la esperanza de reconectar con él. Pero poco después se produce una tragedia y será Vivo quien deba entregarle a Marta el mensaje que Andrés no pudo entregarle: una carta de amor, escrita hace mucho tiempo, en forma de canción.
Sin embargo, si quiere llegar hasta Marta, que reside a un mundo de distancia, Vivo necesitará la ayuda de una alocada adolescente llamada Gabi para cumplir los deseos de su dueño. La aventura animada cuenta con canciones inéditas de Lin-Manuel Miranda, creador de Hamilton y ganador de los premios Tony, Grammy y Pulitzer.
El infierno
2010 - Dir: Luis Estrada
El infierno es una sátira de humor negro sobre el mundo de la droga, la crisis económica, la corrupción y la violencia. La película nos cuenta la historia de Benjamín García (Damián Alcázar), quien después de 20 años de haber cruzado la frontera, durante las fiestas del Bicentenario de la Independencia, es deportado de los Estados Unidos y regresa a su pueblo. Ahí se encuentra un escenario desolador derivado de la violencia y la crisis económica. Pronto Benny se convierte en corruptor de policías, redactor de narcomensajes, asistente de tortura, experto en disolución y descuartizamiento de cuerpos y asesino.