La nueva película de Spike Lee no podría llegar en mejor momento. En un contexto de pandemia, con la imposibilidad del estreno en cines, y en un agitado clima de protestas antiracistas a partir del asesinato de George Floyd, el cineasta entrega Da 5 Bloods, un drama bélico de gran envergadura. Si bien el film iba a ser presentado en Cannes, donde Lee oficiaría de presidente del jurado, el estreno tuvo lugar en Netflix el pasado viernes.
Con el agitado ritmo de un film de aventuras, con peripecias por doquier (muchas disparadas por el salvajismo de la selva) y un poderoso grupo de actores (Delroy Lindo, Clarke Peters, Norm Lewis e Isiah Whitlock Jr.), Spike Lee entrega en su nuevo film una clase de historia, un producto de entretenimiento y un manifiesto político.
Cuatro amigos afroamericanos y ex combatientes de Vietman vuelven al país asiático a cumplir una misión: recatar un cargamento de oro y homenajear a su amigo muerto en combate. Lee construye una cinta de dos horas y media para ejercer la lucha que cubre todo su cine: la lucha contra el racismo sistemático e histórico que tiñe a Estados Unidos. En su anterior film, BlacKkKlansman, nos mostró a un infiltrado negro dentro del KKK y ahora, nuevamente con rigor histórico e ideológico, el director escupe una crítica hacia la presencia de afroamericanos en la Guerra de Vietman, mientras Martin Luther King era asesinado, y la población negra no tenía los mismos derechos que los blancos, pero sí eran enviados a combate. El patriotismo, los traumas posguerra, los vínculos establecidos en combate, la historia del racismo y la lucha hoy identificada como Black Lives Matter son los elementos que recorren la película y se encuentran perfectamente amalgamados.
Tal vez el personaje más interesante sea Paul (Delroy Lindo), un hombre endurecido por los fantasmas de la guerra, imposibilitado para amar a su hijo, votante de Trump (un guiño que nos recuerda la fuerte oposición de director hacia el actual presidente) y tan violento como sensible. Sus monólogos a cámara, cargados con la noción de Dios como bastión, el honor y los valores, se convierten en una especie de delirios que preceden a la muerte. Sus palabras son las que siempre desatan el dramatismo y sus actos la violencia.
Da 5 Bloods es una película compleja por la gran cantidad de elementos que la componen, pero sin perder el objetivo de entretener, para lo cual Lee hecha mano a recursos técnicos y narrativos más que acertados para lograr tanto un gran entretenimiento y un manifiesto. La pantalla es cuadrada cuando vemos flashbacks que suceden en pleno combate, mientras que la imagen cobra más resolución y la pantalla se ensancha cuando nos narra el presente. Y, si bien es un relato de ficción, el director decide incluir material de archivo (discursos de Luther King e imágenes de la masacre en la universidad Kent State) para referenciar el contexto histórico; de hecho el comienzo del film parece anunciar un documental.
La película fue rodada en Vietnam y Tailandia, y algo que no se puede dejar de destacar es la inmensa fotografía, que capta los imponentes paisajes. Otro condimento fundamental que también funciona a la hora de reforzar el manifiesto político es la elección musical: música negra por doquier con una gran presencia de Marvin Gaye. El film se puebla de referencias políticas, históricas, musicales y cinematográficas: un ejemplo de eso es el reconocimiento a la obra de Francis Ford Coppola Apocalypse Now, uno de los films más potentes que se hayan hecho sobre la Guerra de Vietnam. Por lo demás, el film contiene diálogos exquisitos, reflexiones e incluso deja lugar para el humor.
Spike Lee logra, como nos tiene acostumbrados, una obra sólida. Llega en un momento histórico clave, en el que los ataques del racismo parecen ser parte de un loop y se aparecen ante nosotros como el relato de algo que ya vimos. El compromiso, parte fundamental de su cine, se traduce en una nueva denuncia histórico-política, ingresando entre los film que retratan Vietman con una mirada inédita.
https://www.youtube.com/watch?v=bCxGf-VltL4