Gladiador II, una de las películas más esperadas del año, llegó a los cines la semana pasada y recibió muy buenas críticas. La cinta, dirigida por Ridley Scott, está protagonizada por uno de los actores del momento: Paul Mescal.
El irlandés, que se hizo conocido por la exitosa serie Normal People y tuvo una de sus más destacadas actuaciones en el film Aftersun, lidera por primera vez una superproducción de este calibre en el rol de Lucius, el hijo de Maximus (el personaje de Russell Crowe en la cinta original).
Justamente, al ser la primera vez que se enfrentaba a una producción de esta magnitud, con tantos extras y actores en el set, los nervios se apoderaron de él desde el día uno. Sin embargo, allí estuvo Scott para calmarlo… a su manera.
Así lo narró Mescal en diálogo con Collider:
“Creo que el primer día, al salir y ver que había entre doscientos y mil artistas de apoyo y extras, con hogueras encendidas y las murallas de Marruecos, estaba enloqueciendo, como ‘esto es grande en serio’. Pero… lo primero que dijo Ridley antes del rodaje fue: ‘Tus nervios no me sirven de una mierda’. Fue perfecto, muy liberador. Tenía toda la razón”.
Por otro lado, Mescal se refirió al desafío de actuar en la secuela de un film tan épico y no ser opacado por el recuerdo del personaje de Crowe. “Creo que el legado que dejó con esa primera película es extraordinario. Intenté conscientemente sacarme de la cabeza las proyecciones que la gente podía tener sobre el significado de esta película”.
“No la vi después de que me eligieran para el papel, y la vi el día de Año Nuevo con mis amigos, que fue increíble… Y no se gana nada estudiándola como preparación, ya que es un personaje diferente”, cerró.