Kate Winslet es una de las actrices más importantes de Hollywood. Su carrera se ha cimentado sobre grandes películas e inolvidables papeles, habiendo mostrado versatilidad pero también una fuerte inclinación para roles dramáticos. La ganadora del Oscar comenzó su carrera desde lo más alto con Criaturas celestiales (1994) dirigida por Peter Jackson, desarrollando un personaje que le implicó una fuerte dedicación ya que interpretó a una de las adolescentes involucradas en el caso de asesinato de Parker-Hulme.
Tras este film formó parte de la película de época Sensatez y sentimientos bajo la dirección de Ang Lee y luego vendría su gran éxito con Titanic. Con una incipiente pero formidable carrera, Jackson quiso volver a trabajar con ella en El señor de los anillos y le ofreció el rol de Eowyn. Esta película no solo implicaba un gran desafío, ya que se corría de los roles que Winslet venía interpretando, sino que también significaba una gran entrega de tiempo.
Un rodaje demasiado extenso para Winslet
Para rodar la película, el elenco debía instalarse en Nueva Zelanda por tres años y la actriz de El lector estaba recientemente casada, además de que las propuestas cinematográficas abundaban para ella. Sobre este punto de su carrera, la británica habló con Zoe Ball (vía Far Out) y recordó: “Había muchas cosas por venir. Fue increíble realmente, y yo no podía creer que de repente estaba en la posición de tener que elegir qué película hacía. Es extraño para un actor sentir eso y más para un británico”.
Finalmente, Winslet terminó rechazando la oferta de Jackson y su agente habría escrito un mail explicando: “Me temo que Winslet no está disponible. Creo que rechazó el rol por el tiempo que tomará”. Lo cierto es que la primera entrega de El señor de los anillos fue el inicio de una saga con un éxito sin precedentes, aunque no podría decirse que Winslet se arrepintió, ya que su camino en el cine no ha sido más que fructífero. En su lugar, fue la actriz Miranda Lin Otto quien finalmente interpretó el rol de Eowyn en la película épica.