Homo Argentum es un auténtico suceso del cine argentino de este año. La película dirigida por Mariano Cohn y Gastón Duprat está siendo denostada por gran parte de la crítica especializada y el público, aunque ha logrado ser un éxito de taquilla. Desde su estreno el pasado 14 de agosto, la película en la que Guillermo Francella interpreta a 16 personajes se convirtió en una de las más taquilleras del cine nacional, superando el millón de espectadores en tan solo 11 días. Ahora, Disney+ anunció que llegará a su plataforma el 19 de diciembre.
Esta película, que sigue en las salas de cine, generó gran controversia debido a la grieta político-ideológica que se vive en nuestro país. Mientras que el film fue halagado por el presidente Javier Milei, desde la crítica especializada no recibió comentarios positivos. Micropsia Cine la caracterizó como "una colección de chistes malos", mientras que La Nación aseguró que "se queda a mitad de camino a la hora de exponer una suma de estereotipos". Por su parte, Leer Cine publicó: "No es una gran película ni está cerca de serlo".

Microhistorias, personajes estereotipados y la idea del "ser argentino"
Puede decirse que la actuación de Francella y la caracterización de cada personaje son las mayores fortalezas de la película, que se presenta en un formato de minihistorias que replica el consumo y la lógica de la ficción en reels de redes sociales. Además, el film expone críticas a estereotipos de argentinos, aunque más bien ofrece una visión porteñocentrista.
El "garca", el clasista, el timador, el hombre mayor que se casa con una cazafortunas, el individualista de clase alta, el cura villero que romantiza la pobreza, son algunos de los personajes que recorren esta colección de sketches que no se presentan bajo los preceptos narrativos básicos del séptimo arte. En la mayoría de los micros se presenta un personaje y cómo se desenvuelve en una situación, mas no hay desarrollo dramático del mismo.
Homo Argentum es una comedia sin brillo y con algo de resentimiento, una sátira sobre lo que los directores entienden como el "ser argentino" y un posicionamiento político ante el fútbol, el arte, la solidaridad, la construcción de una comunidad y otras yerbas que se presentan completamente ridiculizadas.