Netflix sumó a sus arcas una nueva producción española: Legado en los huesos, la secuela directa de El guardián invisible, título también disponible en la plataforma del gigante del streaming.
Dirigida por Fernando González Molina al igual que su predecesora, esta adaptación cinematográfica de la segunda obra de la famosa Trilogía del Baztán, de la autoría de la española Dolores Redondo (quien también oficia de guionista), sigue la fórmula de la primera entrega: entremezcla el suspenso policiaco con seres mitológicos, magia y un tanto de horror.
En esta ocasión, la historia sitúa al espectador un año después de los crímenes de Basajaun y sigue una inspectora embarazada de nueve meses, Amaia Salazar (Marta Etura), quien se encuentra en la corte de la ciudad esperando el juicio a Jason Medina (Amaruk Kayshapanta), acusado de violar, mutilar y matar a su hijastra Johana Márquez. Pero justo antes del juicio, Medina se suicida en el baño de la Corte y deja una pequeña nota en el bolsillo de sus jeans con una sola palabra escrita: “Tarttalo.” El momento obliga a Amaia a acelerar el proceso de parto y tener a su hijo Ibai.
Cuatro meses después del traumático episodio, la protagonista es reincorporada al servicio activo y, gracias a su aguda mente, es llamada por su superior para presentar dos casos diferentes: Monseñor Landero (Alberto González) y el Padre Sarasola (Imanol Arias) le pidieron específicamente a Amaia que investigara en secreto la profanación de una pequeña iglesia donde se dejó el brazo amputado de un bebé en el altar y un hombre encarcelado en Logroño.
Si bien esta producción de Atresmedia Cine, Nadcon Film, Nostromo Pictures, ARTE y ZDF arribó a los cines españoles el 5 de diciembre, ahora está disponible para todo el mundo a través de Netflix. Podés darle play haciendo click acá.
Por otro, cabe señalar que Ofrenda a la tormenta, la parte final de esta atrapante trilogía, está en camino. Sin embargo, se desconoce en qué momento el film verá la luz, ya que su estreno estaba pautado para junio de este año en España, pero el COVID-19 hizo que se retrasara de manera indefinida.