Lucrecia Martel es una de las directoras argentinas más renombradas a nivel mundial. La realizadora salteña es una eminencia, una influencia para las nuevas generaciones de cineastas y ha ejercido de jurado en múltiples festivales internacionales como Venecia en 2019. Ahora, la directora de La niña santa será parte del jurado internacional en la edición número 12 del Festival Internacional de Cine de Beijing.
Este evento se llevará a cabo del 13 al 20 de agosto y Argentina figura como país invitado de honor, en el marco del 50ª aniversario de las relaciones diplomáticas bilaterales y del Año de Amistad entre China y Argentina. Sobre su aporte en el festival de cine, Martel ha declarado:
“Antes que nada mi agradecimiento al festival por invitar a tantas producciones argentinas. En el nuevo orden mundial de la narrativa, las plataformas se han vuelto una fuente de trabajo casi exclusiva para las personas que antes trabajaban en cine en mi país. Miles de jóvenes estudiantes tienen sus ilusiones laborales puestas en un lenguaje que hoy se ve especialmente acotado a políticas comerciales. Por eso son muy altas mis expectativas en este festival, para ver si es posible pensar de otra manera el futuro de la narrativa audiovisual”.
En varias oportunidades, Martel ha expresado su preocupación por el cine como arte independiente de las nuevas tendencias que involucran las plataformas de streaming y el mercado de las series. Como férrea defensora de la cinematografía en general y específicamente nacional, la directora se presenta como una de las figuras más relevantes.
En otras oportunidades, el cine argentino se ha destacado en el Festival Internacional de Cine de Beijing, como fue en 2016 con La patota de Santiago Mitre, film que compitió y obtuvo el premio Tiantan como mejor film; o en 2021 con Una escuela en Cerro Hueso de Betania Cappato, que fue preseleccionada para la premiación.