Quentin Tarantino demostró su faceta más rencorosa con sus recientes declaraciones para el podcast The Moment, conducido por Brian Koppelman. Allí, el cineasta de 58 años contó que cuando era niño decidió que su madre no recibiría ni un centavo de su fortuna cuando él fuese un escritor famoso.
Concretamente, el director estadounidense recordó la vez que su madre, Connie Zastoupil, menospreció sus creaciones y lo marcó para siempre. Lo que ocurrió es que el pequeño Quentin solía escribir guiones en vez de ensayos, y sus profesores no tardaron en recriminárselo. Así que, cuando su madre se enteró de la situación decidió prohibirle que siguiera con su tendencia hacia la escritura de cuentos.
Según Tarantino, cuando él tenía apenas 12 años, ella le dijo: “Ah, y por cierto, esta pequeña ‘carrera de escritura’ – con las comillas de los dedos y todo – esta pequeña ‘carrera de escritura’ que ¿estás haciendo? Esa mierda se acabó”. Al respecto de este episodio de su vida, él señaló:
“Cuando ella me dijo eso de esa manera sarcástica, estaba en mi cabeza y dije: ‘Está bien, señora, cuando me convierta en un escritor exitoso, nunca verás un centavo de mi éxito. No habrá casa. No hay vacaciones, ni Elvis Cadillac para mamá. No obtienes nada. Porque dijiste eso. Así es, Connie, no obtienes nada de esos $425 millones en efectivo de Django Unchained, o tu parte de los $370 millones de Once Upon A Time… In Hollywood, o los $ 320 millones de Inglorious Basterds‘”.
Más allá de haber hecho esa promesa tan exagerada, Quentin ha cumplido su palabra hasta hoy, y si bien reconoce que la ayudó cuando ella tuvo problemas con el pago de impuestos, no le compró ninguna casa ni auto hasta la fecha. Sin dudas, su historia hará que más de un padre lo piense dos veces antes de burlarse de los talentos de sus herederos en lugar de incentivarlos.