Robert De Niro es uno de los actores más emblemáticos de Hollywood. El estadounidense comenzó su carrera en los años 60 y rápidamente se volvió una de las figuras clave del Nuevo Hollywood, actuando en un gran número de películas dirigidas por Martin Scorsese, con quien sigue trabajando hasta la actualidad.
Los films de gángsters y mafiosos se convirtieron en recurrentes dentro de su filmografía, siendo parte de la trilogía El padrino, de Buenos muchachos, Mean Streets y más. Además, la construcción de personajes con rasgos psicópatas también se le dan de maravilla, tal como demostró en Taxi Driver, El fanático y Cabo de miedo.
Lo cierto es que De Niro ha pasado por todos los géneros cinematográficos brillando también en la comedia, tanto en la saga de El padre de la novia como en Analízame. Con motivo de su cumpleaños número 80, repasamos las cinco películas infaltables de su filmografía.
Taxi Driver
1976 – Dir: Martin Scorsese
La obra maestra de Scorsese es uno de los títulos clave del Nuevo Hollywood, ya que plasma el sentir nihilista de los Estados Unidos luego de Vietnam, la presencia medular de la ciudad dentro de las narraciones y la construcción de un personaje dramático repleto de matices y oscuridades.
De Niro interpreta a Travis Bickle, un excombatiente que decide volverse taxista y circula por los espacios más sórdidos de Nueva York, mientras planea atacar a una banda de proxenetas. Su actuación se mantiene en la historia del cine como una de las más icónicas, no solo por cómo logra transmitir la locura, sino por la crítica social y por volverse un personaje tan atractivo como inolvidable.
Toro salvaje
1980 – Dir: Martin Scorsese
Esta es una de las pocas biopics que ha protagonizado De Niro. Nuevamente de la mano de Scorsese, el actor se puso en la piel del boxeador Jake LaMotta para relatar su historia privada y como deportista. Este es un personaje de alta complejidad dramática y De Niro desarrolla una de sus actuaciones más memorables, no solo desde lo interpretativo sino también desde la apuesta física de tener que encarnar a un boxeador, lo cual le valió el Oscar a Mejor actor.
El rey de la comedia
1982 – Dir: Martin Scorsese
Entre las grandes colaboraciones de Scorsese y De Niro también se cuenta este film de 1982. La película sirvió de fuerte inspiración para Joker -película en la que De Niro tiene un rol secundario- y cuenta la historia de un comediante que está obsesionado con llegar a la televisión y decide secuestrar a un famoso presentador. Este es otro caso en el que De Niro logra desplegar la locura en un personaje y también capta el ambiente de los comediantes de stand up tan representativos de la Nueva York de los 80.
El padrino II
1974 – Dir: Francis Ford Coppola
La trilogía El padrino es uno de los tantos momentos en que Al Pacino y De Niro compartieron pantalla. Los icónicos actores son parte del clan Corleone en esta obra maestra de Francis Ford Coppola, pero fue en la segunda parte en la que De Niro tuvo un papel fundamental, el cual lo llevaría a ser ganador de su primer Oscar en la categoría de Mejor actor de reparto.
Los Fockers: La familia de mi esposo
2004 – Dir: Jay Roach
En el ámbito de la comedia y en una etapa más actual de su carrera, uno de los papeles inolvidables de De Niro es el de Jack Byrnes. Se trata de un exagente de la CIA, un padre protector que no acepta al hombre que se casará con su hija y desplegará una red de artimañas para hacerle la vida cada vez más difícil usando la lógica de un agente secreto. De Niro es exasperante, tierno, desopilante y completamente cómico en este papel que se erige entre los más destacados de su carrera.