Durante los últimos meses, Robert Pattinson ha estado en boca de todo dentro del mundo del cine, por un lado, por haber sido el elegido para interpretar a Bruce Wayne en The Batman, la nueva película sobre el superhéroe que dirigirá Matt Reeves, y por el otro, por haber protagonizado The Lighthouse, la aclamada cinta de horror de Robert Eggers que fascinó a la crítica después de su estreno en el Festival de Cannes a mediados de mayo.
Más allá del hype por ver al ex Crepúsculo ponerse el traje del protector de Gótica y de su aplaudida interpretación en The Lighthouse, Pattinson generó recientemente otro motivo por el que la prensa comenzó a mencionar su nombre cuando reveló las cosas que hizo para adentrarse por completo en el personaje.
Conocido como un actor muy metódico, el joven se metió de lleno en la piel del farero Ephraim Winslow, lo que produjo que, así como el personaje de Pattinson se volvió loco en el guion, también lo hizo Robert en el set.
En un diálogo con Esquire, el inglés dijo:
“El hecho de que estás interpretando a una persona desequilibrada, significa un poco que vos también podés estar desequilibrado todo el tiempo. Bueno, no todo el tiempo, pero algo así como una hora antes de la escena. Podés estar literalmente sentado en el suelo gruñendo y lamiendo charcos de barro.”
Lejos de tratarse de una broma, Pattinson reconoció que eso mismo fue lo que hizo en el set. Además, adoptó la tendencia alcohólica de su personaje, lo que le llevó a un estado complicado durante el rodaje.
“Básicamente estuve inconsciente durante todo el tiempo. Fue una locura. Me pasé tanto tiempo provocándome vomitar. Orinándome en los pantalones. Es la cosa más repugnante. No sé, a lo mejor es muy molesto”, reconoce, refiriéndose también a su compañero de rodaje, Willem Dafoe, que al parecer llegó a su límite en una de las escenas.
“Hay un momento en el que Willem está como durmiendo encima mío y estamos muy, muy borrachos. Sentí que estábamos completamente inmersos en la escena. Estaba sentado ahí intentando tener arcadas y Robert [Eggers] me dijo que parara porque Willem lo estaba mirando como diciendo: ‘Si me vomita encima, me voy del set.’ No tenía absolutamente ni idea de que todo ese drama se estaba desarrollando.”
El estreno mundial de The Lighthouse está programado para enero del 2020.