Tal como el animal del cual toman su nombre, el sexteto bonaerense Camaleón tiene muchos colores en su ser colectivo. Todos ellos han sido bien sincretizados en Formas de llegar, un EP producido por Darío Jalfín y del cual ya se han escuchado tres adelantos. Semanas atrás se le sumó uno más: “No te busques ya en el umbral”, un cóver de la canción de Luis Alberto Spinetta que primero vio la luz con Spinetta Jade. La versión de Camaleón ahonda en la instrospección enérgica que proponen con su trabajo melódico instrumental difícil de etiquetar, pero fácil de llegar al oído de todo melómano ecléctico.
De chicos se conocieron en un taller musical de iniciación y a medida que fueron creciendo, tanto personal como musicalmente, se les presentó su primer desafío juntos en su adolescencia: ser la banda en vivo para un show de teatro clown, Pequeños Mundos, que tuvo dos temporadas en 2013 y 2014. En 2015 tomaron la decisión de conformar una banda donde canalizaran sus inquietudes y ganas de hacer lo suyo. Con el paso de los años crecieron, mutaron, se transformaron y hoy son este sexteto.
Para poder comprender la esencia multicolor de este proyecto, hay que mirar con detenimiento los colores que integran su arcoíris. Una pequeña semblanza de cada miembro: Dino Pérez es el guitarrista y cantante, también co-produce y es guitarrista del cuarteto electro-acústico de Fabricio Robles; Camilo Santella toca la guitarra y aporta grandes armonías al grupo, como en el coro vocal de “Fulgura”; Nehuén Chumbita es el bajista y el crédito cordobés de la banda, también toca el bajo en PUM, Sueño Azul, Fabricio Robles y Debo Weht (cantante que colabora hace varios años con Camaleón como artista invitada arriba de los escenarios); Teo Pérez es el baterista, rol que también desempeña en La Línea Azul y en otros ensambles; Teo López Puccio es el pianista y además es compositor y arreglador de música de obras de teatro; y Sofía Klimkovsky es la saxofonista y flautista, la más reciente incorporación al proyecto que también forma parte de la orquesta de Manuel Estrach y toca jazz en diversos ensambles.
Hasta hace poco, Manuel Sturla era el flautista original del proyecto. Aunque ya no es parte, sigue siendo amigo del resto de la banda como cuando eran pequeños, y junto a ellos fue creador e intérprete de los tres singles publicados previamente: la calma e hipnótica “Sobre el jardín”, la groovy “Viaje al centro de Saturno” y la poética e intensa “Al cielo vivo”. En un punto de esta última se pueden escuchar todos los géneros contenidos por los cuales quieren volar. Tal como dice una parte de la letra: “El cielo es tu color”.
Hay un espíritu viejo en estos jóvenes, que apenas pasan los veinte años, al tomar elementos del jazz fusión, la música popular latinoamericana, los ritmos africanos, el folklore, el soul, el góspel, el R&B, el rock nacional progresivo. De este último género, sobre todo el de los 70, era muy notoria su influencia al principio de los experimentos musicales de Camaleón; con el tiempo solo quedaron ciertos detalles que los llevó a un terreno fresco al contraponerlo a las emociones sonoras que la nueva escena neoyorkina del jazz (la que vio su nacimiento a fines de los 90 y comienzos de los 2000) brinda.
Sus referentes son muy amplios: en un giro de 180 grados, mencionan a Serú Girán y a Snarky Puppy. También figuran en su lista de elegidos: Robert Glasper, Pat Metheny Group, Earth Wind & Fire, Mint Condition, Erykah Badu, Sig Ragga, Caetano Veloso, Chico Buarque, Egberto Gismonti, Susana Baca, Luis Miguel y el Chango Farías Gómez.
Camaleón sirve como catalizador de estas sensaciones sonoras y referencias a la hora de componer de modo colectivo, ya que cada miembro aporta su granito de arena. Eso queda denotado con la elección de la composición de Spinetta “No te busques ya en el umbral”, que suena con una refinada sombra pop que la acerca a las nuevas generaciones. Todo esto sin olvidar al que sería como el séptimo color del arcoíris: Jalfín en su rol de productor. Junto a él seguirán trabajando en esta etapa que incluirá nuevos singles durante el 2020.
Con respecto al concepto de Formas de llegar, material que saldrá por el sello El Club del Disco, sabemos que nace como una conclusión de la etapa inicial y proyecta el camino que desean continuar. Son temas que desarrollaron tocándolos en vivo. El título simboliza los años de trabajo, encuentro y cambio que transitó el grupo. Por eso al mismo tiempo puede hacer alusión a la llegada subjetiva y personal que tiene la música en cada oyente, “llegando” de manera distinta según quien escuche. Como escribió Santella en una de las primeras publicaciones del grupo en Facebook, “Quiere conocerse él mismo y que lo conozcan. Con sus globosos ojos independientes busca comprender los mundos y expresarse. Contar lo que ve tridimensionalmente y sus historias, que quieren atraparte como su lengua a una presa. Entonces ¡ahí va el camaleón! Se mimetiza en el tiempo; en el ahora, en lo que le pasa, con lo que siente a través de todos los géneros inabarcables y expresiones del arte. No es más que eso, flexible y sensible a percepciones en un laberinto a la más linda experiencia que se transmite más allá”.
Escuchá la música de Camaleón en plataformas de streaming.