Era octubre del 2019 y Chile estaba en todas las tapas de los diarios latinoamericanos. Más que Chile, el pueblo chileno. El estallido social recién comenzaba y se anticipaba como uno de los movimientos sociales más grandes de las últimas décadas. El suelo -para muchos y en diferentes aspectos- estaba especialmente inestable, y en ese contexto de cambios profundos es que Diego Cataldo decidió migrar de su natal San Antonio para embarcarse en una nueva aventura.
Sin darle demasiadas vueltas y luego de haber vendido todas sus pertenencias en tan solo una semana, compró un pasaje de ida a Argentina, desde donde cruzó a Uruguay para comenzar de cero. En Montevideo actualmente estudia música, trabaja como tatuador y desarrolla su proyecto solista, Diog Caltad, con el que en marzo estrenó Silencio, un EP audiovisual y acústico que honra la ternura e invita a disfrutar de nuestra vulnerabilidad.
https://youtu.be/R5zD0FxVP8M
Entre Valparaíso y San Antonio, Diog integró varias bandas ligadas al rock fusión. Su mamá siempre cantó y también sus tías, tíos, tíos abuelos. Eran buenos para la cueca y se la inculcaban en reuniones familiares donde las guitarras y las armonías vocales eran protagonistas. Así, la música siempre fue parte de su vida y componer canciones se dio de manera natural con el paso de los años y de la absorción de los diferentes estilos y estéticas que se curtían en los bares y centros culturales de Valparaíso y sus alrededores, lugares famosos por su escena bohemia abierta 24/7.
La llegada de Diog a Uruguay -y el movimiento interno que implica reubicarse en un lugar nuevo, sin amigos ni familia cerca- trajo consigo la búsqueda de una música más personal, algo así como un canal para encontrar la propia contención. Experimentando con el género canción e interpretando melismáticas melodías que dejan en evidencia su gran técnica vocal, el compositor comenzó a consolidar una estética propia que combina la balada romántica con el folk y el neosoul.
Su single debut fue “Siento”, canción estrenada en febrero de 2022 que evidenció el gusto de Diog Caltad por el R&B y que contó con un videoclip protagonizado por un grupo de bailarines uruguayos. “Es una canción que nació de intentar recordar lo bueno de una relación que no terminó de la mejor manera. Quise reflejar lo lindo que me quedó de esos momentos y sentí que lo más importante de todo era el solo acto de estar con otro y acompañarse mutuamente -cuenta el compositor en conversación con Indie Hoy-. El recibimiento de este single fue una locura. Nunca pensé que iba a llamar tanto la atención o que le iba a gustar tanto a las personas. Fue un proceso hermoso donde aprendí muchísimo”.
A un año y unos meses de la salida de ese primer single, Diog Caltad presenta Silencio, un EP de cuatro canciones grabadas solo con la guitarra y la voz, en directo y al aire libre. Este nuevo trabajo intenta resumir el sentimiento que tiene el chileno sobre el hacer música hoy, en un mundo cada vez más agitado, con una sobreinformación inédita y donde pocos parecen tener la fortuna de centrarse solo en el aquí y ahora.
“El concepto nace de la necesidad de poder llegar a transmitir realmente lo que sentimos cuando compartimos nuestra música en la vida real, fuera de la virtualidad”, explicó el cantautor con el anuncio del disco, haciendo alusión a su formato íntimo y espontáneo, grabando sin cortes ni correcciones en pos de dejar al descubierto la esencia y al ritmo honesto de cada canción.
De la mano de esta búsqueda estética, las letras de Diog también son una invitación a bajar las ansiedades del día a día y a perseguir la calma. El autor confesó que estaba trabajando para que el disco saliera en noviembre del año pasado, pero que con todo el trabajo que conlleva y todas las sorpresas del camino, se dio cuenta que no lo iba a lograr y decidió respirar, bajar las expectativas y entregarse a tiempos más realistas.
“Creo que fue un proceso súper lindo -asegura Diog en conversación con Indie Hoy-. Me hizo valorar un montón de cosas que con la velocidad de la vida estaba pasando por alto. Confío en darle a la música lo que necesita y este EP me pidió un poquito más de tiempo, pasar las fiestas para tomarlo con calma y escapar un poquito de la vorágine del cotidiano. La música constantemente me enseña a bajar a la ansiedad e intentar salir del perfeccionismo para disfrutar, y este EP está justamente pensado para crear un ambiente íntimo y de tranquilidad, un espacio para conectar con la ternura. Si hay algo que quiero traer con la mayoría de mis canciones es que conectemos con esa ternura y podamos sentir la fuerza que viene con ella”.
Escuchá Silencio en plataformas de streaming (Spotify, Tidal, Apple Music).