Expediciones condensa dos años de Doble Seda arriba del escenario, recorriendo la escena de hardcore cordobesa y acumulando un impulso explosivo por salir a la luz. Siendo el EP debut de la banda, se siente como un homenaje a sus grandes inspiraciones como Boom Boom Kid y Eterna Inocencia; de hecho, el cantante Joaquín Leguiza comenzó versionando clásicos de Misfits, 2 Minutos, Flema, Loquero y The Cure, influencias que también se sienten en su sensibilidad gótica y energía punk.
Las guitarras ásperas y abismales de Joaquín Aichino y Manuel Volta crean un efecto inmersivo, mientras que el bajo de Ezequiel Arce y la batería de Alejo Giaccaglia marcan un pulso esencial para esta receta hipnótica. Los shows de la banda se completan con una escenografía y un despliegue visual que captan todos los sentidos. Como proyecto multidisciplinario, Doble Seda se corona con Agustina Correa en fotografía, Benjamín Dametto en artes visuales y Rodrigo Morales en la producción.
Alineados con la filosofía DIY del punk, la banda editó un fanzine de Expediciones en donde muestra otra faceta: la transposición de sus letras en ilustraciones realizadas por el guitarrista Manuel Volta. También hay una escena legítimamente punk en el track de apertura, “Partículas de aire”, cuando evocan un patrullero y un oficial perdido. “En esencia, el proyecto se trata de explorar lo que sentimos y de expandir nuestros límites creativos —cuenta la banda en conversación con Indie Hoy—. Este EP tiene como objetivo reflejar las diversas caras de la banda y sus distintas expresiones musicales, que incluyen desde lo punk hasta lo dark, emo y acústico”.
Efectivamente, si hay un género trasversal a todo el EP es el emo, rasgando la marca que define a Doble Seda: el post hardcore. Su arte es “transmitir emociones y vacíos cotidianos”, identifica el grupo, como muestran en “Nada puede complicarse” cuando rompen en un suspenso que inunda de distorsión, susurros y gritos.
La sensibilidad que encarna el grupo está a flor de piel en la acústica serena del último track, “Al Avidya” ("ignorancia" en sánscrito). “Caníbal de mi animal lucha afuera”, rinden cuenta sus versos. “¿Podrá el cuerpo volver a respirar?”, se pregunta una voz atormentada. En “Tierras conectadas”, quien canta parece un náufrago de novela, mientras que la guitarra es agradable como el mar en donde “construiste un sueño profundo en barcos de papel”. La destinataria no es un ser humano, sino un “alma prohibida” del ser amado, mientras que quien canta pasa “días atado a verte en un escrito, esperando a que no pase nada”. Cifrada en tinta, “acostumbrate a ser mi voz”. Ambos tracks son, para la banda, "una muestra de que no nos limitamos a un solo género, sino que nos aventuramos a experimentar con una variedad de estilos”.
Doble Seda interpreta estas canciones desde 2023, un año memorable en el que debutaron con temas propios en Casa Babylon. Con el mismo espíritu desbordante, el EP irrumpe en su tercer track con un “Himno de los vampiros”, cantado por una voz al borde de quebrarse. Refleja la impunidad del amor con versos como: “Yo nunca me quise enamorar de vos, será que me acostumbré a tenerte por acá”. La letra expone la encrucijada de las relaciones, sin perder fuerza ni honestidad: “Yo nunca te quise mentir, pero fue mejor así”. En una confesión que sorprende, la banda se aleja del romance y se rinde a la oscuridad: “Ahora solo quiero probar la sangre de tu cuello”.
Escuchá Doble Seda en plataformas (Spotify, Tidal, Apple Music).