Victoria Reed ha canalizado su búsqueda de sanación personal, en medio del paso a la adultez, a través de la música. La artista nacida en Estados Unidos de padres griegos e italianos debutó en 2016 con su álbum Chariot, obra que en su momento fue elogiada gracias a sus contundentes melodías y sus atmósferas casi mágicas. El proceso creativo detrás de ese material fue bastante intenso, al haberlo escrito luego de dejar la universidad en Chicago e irse a vivir a Nueva York por un tiempo.
Más adelante, la joven cantante y compositora siguió haciendo canciones de pop experimental inspiradas en sus propias emociones y en el uso de recursos místicos como el tarot y la astrología. Fue así como nació Aquamadre, su segundo disco en el cual predominan los sintetizadores serpenteantes, las guitarras sutiles y las bases de percusión que recuerdan al pop de los ochenta. De hecho, en su repertorio se pueden encontrar una marcada herencia de artistas como Kate Bush y Cocteau Twins. Lo etéreo es una de las características de sus composiciones: es, en parte, esa volatilidad y ese coqueteo con lo sagrado lo que convierte a su música en algo digno de atención.
Por otro lado, Victoria no es ajena al momento histórico en el cual le ha tocado vivir y en sus letras se retratan diversos dilemas muy propios de la feminidad posmoderna y la lucha por encontrar un lugar propio donde echar raíces en un mundo tan cambiante y mediado por lo digital. El más reciente lanzamiento de Reed es el single “I Couldn’t Take a Lie”, canción que habla sobre lo dolorosa que puede ser una mentira en una relación y cómo siempre es preferible enfrentarse a la realidad.
Acerca de esta pieza sonora, Victoria comentó en un comunicado:
“Esta fue una de las últimas canciones que escribí antes de mudarme de Nueva York a CDMX. Grabé un demo en el piano, usando la app de notas de voz en mi teléfono, que luego compartí con mi querida amiga Misa Barajas en Física Moderna Records, pensando que podría querer darle un ritmo. Aproximadamente un año después, me sorprendió con todo este mundo, una versión totalmente producida que había elaborado alrededor de mi pequeña nota de voz lo-fi. Inmediatamente se sintió tan fiel a la producción que había imaginado en mi cabeza cuando escribí la canción, no podía creerlo. Ella, y Mariano Lanús, quien ayudó a producir la pista, simplemente llegaron a donde yo estaba yendo con ella. No hizo falta mucho desde ese punto para llegar juntos a la meta. La canción en sí es, en muchos sentidos, una reacción al trauma de haber sido manipulada en relaciones pasadas hasta el punto de no poder distinguir la realidad de la ficción”.
Mirá el video de “Couldn’t Take a Lie“, protagonizado por ella misma y dirigido por Marcelo Quiñones, a continuación y encontrá la música de Victoria Reed en plataformas (Bandcamp, Spotify, Apple Music):