Así como aparecieron de la nada y empezaron un romance con su público tras su debut titulado Tigermilk (1996), Belle and Sebastian anunció su disco Late Developers poco antes de que saliera a principios de este año. Desde el inicio de su carrera, los escoceses resultaron ser una rara avis como banda: sin grandes aspiraciones ni tampoco una imagen obsesivamente curada para caerle bien al mercado, lograron llamar la atención del público con su esencia despreocupada y una visión grupal que los elevó al status de leyendas dentro del indie pop y folk, con la creación de los discos If You’re Feeling Sinister (1996) y The Boy With the Arab Strap (1998).
Casi 30 años de permanecer en la industria musical sin perder esa impronta parece rendir sus frutos. Belle and Sebastian son como esas estrellas infantiles de Disney que evitaron caer en las drogas y la explotación laboral, aunque a veces esas condiciones sirvan (discutiblemente) para crear música interesante. Ahora sus miembros son adultos en serio, tienen familias y lo aprendido con el paso del tiempo parece destilarse temáticamente dentro de su música. Pero, ¿crecer necesariamente implica conformarse? Late Developers intenta contestar esta pregunta de la manera menos solemne posible. Como proyecto, el sonido folk de la banda sigue diluyéndose dentro de la música electrónica y un pop efervescente logrado por el uso de sintetizadores, algo que el grupo liderado por Stuart Murdoch ya había empezado a explorar en A Bit of Previous (2022).
Al escuchar el single “I Don’t Know What You See In Me“, quizás la primera impresión sea que The Chainsmokers secuestró al grupo y los obligó a producir el tema apuntándoles un arma. Está claro que no suena exactamente como el Murdoch de antaño que cantaba “Get Me Away From Here I’m Dying“. Pero, lejos de representar una crisis de identidad, funciona. Primero, porque la letra es precisa y habla sobre lo milagroso que puede ser enamorarse al mismo tiempo que alguien se enamora de vos, y segundo, porque quizás sí hace falta una melodía de synth pop absurdamente pegadiza para poder transmitir la potencia de ese sentimiento.
Muchas de las canciones en Late Developers remiten a un pasado, tanto autobiográfico como ficticio, sobre el que el grupo reflexiona para conversar acerca del proceso de crecer con sus oyentes. En “When We Were Very Young“, un tema melancólico que complementa el folk con unos sintetizadores que le dan un toque de los ochentas, Murdoch canta: “When we were very young, we loved our selfish fun/ We cared what people thought about our selfish words/ …now we’ve got kids and dystopia”. El matrimonio como una apuesta riesgosa aparece en “So In The Moment“, un tema llamativamente sesentero que por momentos parece salido de la discografía de The Mamas & the Papas, logrado por la armonía entre las voces del grupo y una melodía que mezcla flautas con música electrónica acompañando esta advertencia: “Say ‘I do’ and say ‘I will, jump into the fire’”.
Pero Late Developers está lejos de ser un álbum confesional y nostálgico que reniega de la juventud perdida. Su producción fresca y lirismo te hacen querer bailar mientras estás escuchando sobre traer hijos al mundo, el desamor y los vaivenes de transitar los vínculos. Si son tiempos difíciles para ser amantes y más fáciles para ser amigos -como dice Murdoch en el tema folk “Will I Tell You A Secret“-, a lo mejor resulta útil recordar lo siguiente: “The object of your love/ Prob’ly don’t exist”.
La sensación que prevalece al escuchar el disco es la de que el tiempo pone las cosas en perspectiva, y no por eso la adultez significa un gran momento de revelación. “Late Developers“, una canción folk con tintes de gospel, dice: “People wasting all my time ’cause time grows thin / They’re looking for answers to the same old questions/ How, why, where?/ They’re important, I still love them, but beware”. Parece que estos cool kids están más grandes y entendieron que la búsqueda de sentido está en las cosas concretas que nos hacen sentir más vivos.
Unas menciones especiales merecen “Do You Follow“, uno de los temas con más groove del disco, y conceptualmente uno de los más interesantes también. Murdoch y Sarah Martin encarnan a dos amantes que discuten sobre las peripecias de su relación. “When You’re Not With Me” seduce con su mezcla de influencias folk-rock y música electrónica.
Late Developers es un acercamiento de la banda hacia nuevos horizontes musicales, que logra converger todas sus viejas y nuevas influencias artísticas en un proyecto sólido con momentos muy bellos. De alguna manera, el grupo está más joven que nunca, transformando su música de manera refrescante a base de la experiencia. Tampoco abandonaron su espíritu rebelde: “When The Cynics Stare Back From The Wall“, un tema inédito que salió a la luz ahora, ofrece un mensaje de resistencia al estilo del poema de Dylan Thomas “No entres dócilmente en esa noche quieta”. No te caigas aunque los cínicos te miren, advierte Belle and Sebastian.
Escuchá Late Developers en plataformas de streaming (Bandcamp, Spotify, Tidal, Apple Music).