El proyecto alternativo del guitarrista de Real Estate, Matthew Mondanile, nos presenta su cuarto y más ambicioso trabajo.
Ducktails no es Real Estate, pero tampoco busca serlo. Y si bien, tal vez su mejor entrega hasta la fecha, Ducktails III: Arcade Dynamites, no compita en el mismo nivel que el aclamado Days, Ducktails no deja de ser una banda digna de reconocimiento, donde Matthew Mondanile parece desplegar sus dotes artisticos y sus ambiciones musicales más cómodo que en cualquier otro ámbito.
Para ésta entrega parece que la palabra ambición es clave. Salen de ese sonido lo-fi, psicodélico que antes de Arcade Dynamites ni siqueira se molestaba en tener lírica o voz, para adentrarse en un mundo más pulcro, detallado y sobre todo: pop. Con colaboraciones de musicos amigos como Big Troubles, Daniel Lopatin (Oneohtrix point), Joel Ford (Ford & Lopatin) o hasta Madeline Follin de Cults, Mondanile se posiciona como el director de orquesta de este intrincado proyecto como lo es The Flower Lane.
“The Ivy Covered House” es el temita que abre el disco y es probablemente el tema más realestatístico que encontremos en esta entrega. Pero eso está bien, para qué se molestaría Mondanile en crear un proyecto alternativo a Real Estate si se embarcara en los mismos sonidos. Como aclaré anteriormente, ese no es el caso de Ducktails, y nunca lo fue.
La canción que le da nombre al disco sigue en la misma línea… un poco melancólica y monótona, pero nos permite empezar a apreciar los diferentes matices en este nuevo sonido de Ducktails. Esto se va a reforzar, y sino alcanzar su auge en “Under Cover”, un temita altamente bailable que con sólo repetir una misma línea lírica sirve para demostrar este virtuosismo musical que Mondanile se esfuerza en lograr. Para ello utiliza numerosos recursos: una sólida base de bajo, teclados ochentosos, guitarras poderosas y al mismo tiempo relajantes y hasta un solo de saxo. El tema es que “Under Cover” puede resultar innecesariamente largo y esa es una falencia que también encontramos en numerosas partes del disco.
“Timoty shy” es otra canción bien lograda, aunque también un poco monótona y sin grandes cambios en su estructura, sólo cabe resaltar el gran solo de guitarra la final de la canción pero, de nuevo, ya sabemos que Mondanile no tiene problemas en desempeñarse en este ámbito. “Planet Phrom” es probablemente otro de los puntos más importantes del disco. Con un ambiente creado exitosamente, se presenta simpática y muy disfrutable. En la misma línea se encuentran canciones como “International Date Line” o la encargada de cerrar el disco: “Academy Avenue”.
“Assistan Director” es otra muestra de complejidad musical, con una línea de bajo llena de groove, es imposible dejar de lado lo que gobierna al disco, ese pop ochentoso fácilmente bailable en alguna discoteca alejada en el tiempo.
El otro pico de esta entrega es claramente “Sedan Magic”, con la colaboración de Madeline Follin de Cults dando un toque místico en cada estribillo de la canción , nos trasporta exitosamente a un ambiente etéreo, completamente hipnótico.
Es imposible dejar de mencionar otro de los grandes logros del disco: “Letter of Intent” , esta vez acompañado de la voz de Jessa Farkas de Future Shuttle y los ya mencionados Daniel Lopatin en sintetizadores y Joel Ford en bajo. Es una gran canción que podemos situar en la misma línea de “Sedan Magic”.
Sin embargo, estos grandes logros del disco no sirven para compensar las graves falencias del mismo. Porque si bien es un gran disco en individualidades, el disco como un todo no dice nada, no sorprende. Todos sabemos de los dotes musicales de Mondanile y ahora solo parece haberlos complementado llamando a un par de amigos al estudio y dejando de lado el sonido lo-fi hacia algo más prolijo y de numerosos matices. Pero no hay búsqueda más allá de eso, es una ejecución segura que crea un disco agradable a la escucha pero que no causa ningún otro tipo de emoción más allá de eso. Lo que quiero dejar en claro es que: no creo que mi vida haya cambiado luego de escuchar este disco. Lo único que me sorprende de esta entrega en que con canciones tan buenas como “Sedan Magic” o “Letter of Intent” el disco en su totalidad pase desapercibido. A este disco le falta alma, trascender hacia el interior de sus oyentes y dejarlos esperando por más. Capas y capas de virtuosismo musical no sirven para disimular esta carencia.
Ducktails – The Flower Lane
2013 – Domino
01. Ivy Covered House
02. The Flower Lane
03. Under Cover
04. Timothy Shy
05. Planet Phrom
06. Assistant Director
07. Sedan Magic
08. International Date Line
09. Letter of Intent
10. Academy Avenue