Priests es una banda neoyorquina formada en el 2012. Comenzaron a obtener cierta atención con una serie de EPs y cintas de cassette publicados por Sister Polygon Records, que presentaban un sonido muy intenso, con canciones muy políticamente cargadas.
La primera vez que los escuché fue el año pasado, cuando “Jj”, uno de los singles que anticipaban este ábum, salió. Mi primera impresión fue buena: parecía una banda punk interesante con algunos toques de surf rock, la canción era pegadiza y tenía una perfomance excelente por parte de su cantante, Katie Alice Greer. Temáticamente, la canción trataba sobre un ex de la cantante, el cual parecía caer en un estereotipo bastante satírico de un chico deportista de una fraternidad universitaria. Esta canción ya dejaba entrever qué iba a tratar el álbum.
La premisa de Nothing Feels Natural se hace evidente en el título mismo. Entrar en este álbum es sentarse a escuchar las reflexiones de la banda acerca de la sociedad posmoderna, comentando sobre diferentes puntos de la misma: el patriarcado, prácticas de consumo, la ciencia, personas extrañas, entre otros tópicos. No obstante, no es una denuncia a gran escala; es más bien, una mirada al pasado de Greer. Una mirada desde la que cuestiona cosas en las que en algún momento creyó o, para ser más precisos, sintió que eran naturales. Ejemplos de esto son el track “No Big Bang”, el cual presenta un interesante ritmo ejecutado por drum machines, que más que una canción es un número de palabra hablada, donde Greer habla sobre el terror que le genera el concepto del “progreso”. O también, el primer tema, “Appropiate”, que presenta un beat muy poderoso y simple que va creciendo hasta tomar suficiente velocidad, para luego desmoronarse por completo, dando lugar a una atmósfera un tanto oscura y desquiciante. En esta canción, Greer habla sobre el concepto de apropiarse de algo: no solamente como una práctica de consumo, sino también de apropiarse de la tierra y ser despojado de lo que uno tiene.
En el aspecto sonoro, Nothing Feels Natural podría pasar en un primer momento como un disco más en la actual movida de surf rock o punk rock. Sin embargo, con repetidas reproducciones, ciertos detalles comienzan a aparecer que lo hacen destacarse. En primer lugar, las canciones suelen presentar instrumentación agregada que le dan más diversidad al sonido. Desde el primer track, “Appropiate”, empezamos a escuchar la presencia del saxofón, que estará presente en otras canciones. Sin embargo, mi ejemplo favorito de esto es en el último tema, “Suck”, donde además del saxo, encontramos la presencia de percusión agregada, la cual va cobrando lentamente presencia en la canción; suena como algo que LCD Soundsystem podría haber arreglado. Es una excelente forma de cerrar el álbum. Además, prueba que la banda tiene cierto potencial a la hora de crear un groove bailable.
Por otro lado, Priests no se ciñe únicamente a un género musical y toma prestados sonidos de la new wave, en canciones como “Pink White House”. Estos detalles son los que le dan al disco un sello distintivo que lo separa y lo eleva en comparación a otros artistas que puedan apuntar a un sonido similar. No obstante, la banda no deja de tener un sonido predominantemente punk, cuyos mejores ejemplos son “Leila 20” o “Puff”.
No menos importante es la voz de Greer, que puede ser increíblemente variable a lo largo del disco. Desde tracks donde se la escucha gritando con muchísima rabia, pasando por números de “spoken word”, hasta canciones como “Nicki”, donde su performance se ajusta perfectamente al personaje depresivo que describe en la canción.
A modo de resumen, se puede decir que Priests lanzó un muy buen álbum debut, que tiene un sonido muy característico pero que puede ser bastante versátil. Definitivamente es una banda que tiene mucho lugar para crecer y estaré expectante por lo que hagan en un futuro.
Recomendaría este disco a fanáticos de bandas como Wavves y Best Coast, así como también a seguidores de Sonic Youth o Sleater-Kinney. También se lo recomendaría a cualquier persona que disfrute su música cargada de mensajes políticos y de protesta. Por otro lado, si bien este álbum no tiene nada que ocultar y va a tirarte con todo lo que tenga desde la primera escucha, requiere de unas reiteradas reproducciones para terminar de descifrarlo por completo y apreciar las sutilezas que tiene y que lo hacen único.
Priests – Nothing Feels Natural
2017 – Sister Polygon
01. Appropriate
02. JJ
03. Nicki
04. Lelia 20
05. No Big Bang
06. Interlude
07. Nothing Feels Natural
08. Pink White House
09. Puff
10. Suck