Renzo Montalbano

blank — Renzo Montalbano en Niceto Club, marzo 2017 - Foto: Norberto Ayala

Renzo Montalbano irrumpió en la escena local desde muy temprana edad. A sus 16 años, el músico ganó popularidad con canciones cándidas y llenas de gracia como "Chocolatada con medialunas". Sin embargo, ya han transcurrido seis años desde entonces, y Renzo ha ganado mucha cancha gracias a su trayectoria junto a Gativideo, la banda que preside junto a sus amigos. Así que lejos de entregar otra oda a lo inocente, en su segundo disco en solitario da un paso firme hacia la adultez. De hecho, no sería desatinado describirlo como un Sandro Centennial.

Del mismo modo que Cuco ha retomado la bandera del romanticismo de antaño pese a inscribirse en el indie pop; Montalbano propone seducción en los términos de la vieja escuela del pop latino: con declaraciones apasionadas, coros femeninos y saxofones por doquier. Sencillos como "Tremendo" o "Por Vos" son el perfecto ejemplo de esa fórmula ganadora. Lejos de apegarse a dogmas patriarcales, los tracks de Potente dejan al descubierto a un galán sensible que lucha con sus propias inseguridades. Aquello queda claro en cortes como "Volver a respirar", donde él confiesa su introversión y le canta a su amor platónico: "Si no fuera tímido/Te hablaría todo el día/Por ahora no va a pasar".

Por su parte, "No te vayas", el hit indiscutido de esta producción, se orienta al romance con un contagioso coro acompañado de una cadencia y arreglos propios del R&B. La intención de Renzo de evolucionar hacia rumbos musicales más maduros no solo se evidencia en sus letras y en el look con el que posa en la portada; sino también en la cuidada producción de este disco que suena en formato de alta fidelidad, una propuesta bastante alejada de sus inicios lo-fi.

Si bien se trata de un álbum grandilocuente, Potente no es un material pretencioso y vacío de contenido emocional. Por el contrario, es un astuto ejercicio de honestidad, donde la voz de barítono de Renzo reluce mientras que los intentos de ligar se despliegan con elegancia, sin incurrir en la masculinidad tóxica presente en tantas otras creaciones musicales contemporáneas. Sin dudas, Potente es un título que le calza a la perfección a esta trabajo.