Este trío londinense editó un EP allá por 2008, titulado “Ahead of the Rain”, que pasó inadvertido para la mayoría de la crítica, pero a su vez llegó a otras buenas manos. Fueron los favoritos de Chris Martin y los invitó a telonearlos en un par de conciertos de su banda Coldplay, y también de Rik Simpson, que tras haber producido a bandas como Blur o PJ Harvey, decidió colaborar con ellos.
Así nace su primer larga duración, editado en febrero de este año, “The Sleep Tape“. Y muy pocas veces un disco tiene un nombre que le calza tan bien. Es un disco para escuchar envuelto en almohadas, mientras que la luz del sol mañanero se filtra por las cortinas, así acostado, en una especie de ensueño narcolépsico. Nos transporta a ambientes nocturnos, con voces y efectos que evocan a los Flaming Lips, Slowdive o Spiritualized.
El disco comienza con la magnífica “The Midnight Bell”, que al mejor estilo Cocteau Twins se construye sobre una base de dream-pop con arreglos electrónicos. Una verdadera maravilla. Luego, el disco se transforma en algo más folk acústico, con agregados de teclados y algunos arreglos electrónicos también, hasta llegar a “Odd & Evens”, que es mucho más pop. “A Future Ending” es un tributo a los Raveonettes más melódicos, y “Pump Your Little Heart” cierra el disco resumiéndonos todo lo que este disco anteriormente nos transmitió: un universo personal más que interesante de visitar.
The High Wire – The Sleep Tapes (2010)
01. The Midnight Bell
02. Hang From The Lights
03. New Lovers
04. Sleep Tape
05. Honeycomb
06. Odds & Evens
07. Its No Secret
08. Letting In The Light
09. A Future Ending
10. Exit
11. Pump Your Little Heart
12. Bodyclocks