Cuando atiende el teléfono, Alejandro Schuster, cantante y guitarrista de Viva Elástico, finaliza una carcajada. Está en su casa con un amigo, el fótografo Manuel Cascallar, que no para de disparar con su cámara. Alejandro habla a borbotones y solo se toma pausas para beber o para pitar. Después de mucho tiempo de información velada e incertidumbre en torno al futuro de su banda, se muere de ganas de contarlo todo.
Viva Elástico lanzó a mediados de 2015 el single “Oh Viernes“, compuesto por un lado A y un lado B (“La Vida Entera”) que funcionaban como adelanto de lo que, aseguraron, sería su tercer disco de estudio. Pero algo ocurrió en el medio y aquella promesa debió ser postergada.
Mientras tanto la banda dio algunos shows que ayudaron a comprender lo que estaba pasando. Aparecieron nuevas caras (el guitarrista Andrés Ruiz y el bajista Jean Jacques Peyronel, hijo del baterista de Riff, Michel Peyronel) y otras actitudes, lo que impactó de lleno en el sonido y en la interpretación de sus canciones más conocidas.
“Estuve componiendo a mansalva”, asegura Alejandro y profundiza: “De hecho sigo componiendo porque voy a lanzar un disco solista a mediados del 2017, pero con Viva Elástico estamos re conectados”. A finales de septiembre se metieron a grabar las canciones de su nuevo disco en los estudios DDR, y si nada se interpone en su camino, puede que aparezca debajo del próximo árbol de Navidad.
¿El nuevo disco no tiene nada que ver con el single “Oh Viernes“?
Bueno, no sé si no tiene nada que ver porque somos nosotros. Viva Elástico es una banda que quiere indagar constantemente en diferentes géneros porque además estamos conformados por músicos de bandas ajenas. El baterista viene del palo del rap, del hip hop, de la buena música afroamericana, y yo soy un fan acérrimo de África, de Fela Kuti y de los grandes músicos negros estadounidenses como Sun Ra o Don Cherry. Desde ahí paso al punk más zarpado, como P.I.L. por ejemplo. El grupo es como una evolución de efectos, estamos todos en caos tratando de arrimar a una idea, y como yo soy el chabón que compone las canciones, por ahí doy una directiva que quiebra. En este disco plasmamos nuestras identidades personales, que a su vez pertenecen solamente a la identidad de Viva Elástico.
Entonces todos juntos forman una identidad compuesta por sus respectivas identidades…
Sí, claro, es así. Ahora entró a la banda Andrés Ruiz, que es bastante conocido en el underground, y Jean Jacques Peyronel, un gran bajista. Vamos a sacar un disco de 11 o 12 canciones nuevas.
¿Va a salir este año?
Queremos hacer como un regalo de fin de año, veremos si será el disco completo o la mitad. Pero bueno, por ahí se atrasa.
Si lo lanzan a fin de año se meten en la lucha por lo mejor del 2016…
Sí… pero eso nos chupa un huevo. Una vez salimos campeones (se ríe) en la Rolling Stone, creo. Viva Elástico, de 2009, fue elegido como mejor disco del año, o algo así, en el 2010. Igual les debemos un favor increíble porque lo valoraron de esa manera. Lo cierto es que el nuevo disco viene muy bien parido y es la primera vez que Viva Elástico se puede dar ciertos gustos. Vamos a tener productor, ingeniero, drum doctor, y lo más lindo es que en este disco van a trabajar todos los productores que trabajaron con nosotros.
¿Cómo te sentís con la nueva formación?
Es la mejor formación que tuve en mi vida.
¿Por qué se dio el cambio?
Lo que pasó es que Viva Elástico se dio cuenta que tenía que seguir otro camino. Sentimos que es momento de reivindicar la música. El arte es el proceso más importante de las personas en la parábola de la vida. Cuando llega la curva te das cuenta que no sabés qué vas a hacer cuando entres en esa cosa plana. Yo tengo 29 años, me di cuenta que necesitaba reivindicar la curva. Es mi momento más artístico de todos, no puedo negar eso, no puedo hacer una canción más pop de lo que necesito hacer. Viva Elástico va a tocar una música intensa, intensa de verdad. Vamos a mostrar un poco de lo que fuimos y de lo que seríamos hoy si hubiéramos hecho el primer o el segundo disco en este entonces. Va a ser una banda cuasi post punk, electrónica, llena de remedios y de locura, tal como quisimos ser siempre.