No es ningún secreto que LatinGeisha es una de las artistas más interesantes y poderosas de la escena emergente argentina. Sin saltearse etapas y muy consciente de que la pelea dentro de una industria siempre desigual recién empieza, Lara Jordán se abre paso con mucha firmeza y con la absoluta certeza de que eso que tanto busca está por llegar. Su segundo disco de estudio, El año del dragón significa una notable evolución dentro de una propuesta que desde el primer momento se destacó por su crudeza, precisión y versatilidad.
Acompañada por el productor 81CLFS, su mano derecha en este juego, LatinGeisha habló en profundidad con Indie Hoy y dejó en claro que esquivar preguntas incómodas no es lo suyo. Claro que primero hubo tiempo para hablar de El año del dragón, disco para el que trabajaron con dos productores muy diferentes entre sí –Marcos Bori y Maxi Prieto– que supieron dejar su huella en las dos caras de un disco ecléctico. “La idea fue colaborar con dos personas que trabajan con esas cuestiones que yo quería profundizar en cuanto a lo sonoro”, afirma la Jordán.
“El lado A fue con Marcos Bori, que es muy musical -continúa Jordán-. Él tiene una cabeza de persona que hace arreglos para otros instrumentos. Con él hicimos ‘Letal’, un tema que está inspirado en los Bee Gees, algo que yo sola no hubiese podido encarar. Y el lado B lo hicimos explorando a fondo los caminos del hip-hop con Maxi Prieto. Hubo muchísima investigación en ese sentido”.
En lo visual también hubo un salto muy importante, algo en lo que tuvo que ver el trabajo de un referente dentro del hip-hop como Punto Nacho, quien trabaja con Acru y que “nos ayudó a expandir nuestros horizontes creativos”. Nacho y Milo Placas trabajaron la dirección del videoclip de “Letal”, canción que abre el disco y que sorprende por abrazarse de forma directa con el pop y con la esencia de la música disco originaria. Si bien estas incursiones siempre son arriesgadas, el hecho de que LatinGeisha haya elegido abrir El año del dragón con una pieza tan distinta a su marca sonora registrada habla con creces de su ambición y coraje.
“Poner ‘Letal’ adelante de todo fue un salto a la pileta, pero nos gustó mucho el sonido al que llegamos -admite-. La idea era justamente explorar universos como los de Madonna, Lady Gaga, Ariana Grande y otras artistas que están en mi cabeza más allá de que no suela mostrarlo en todas mis canciones. Lo que quise hacer fue patear el tablero pero en serio, mostrar de entrada que en este disco había un rango de cosas para escuchar”.
La idea de un contraste entre fantasía y realidad es una constante en LatinGeisha, quedando a la luz las dos facetas que conviven dentro de la artista. En ese sentido, Lara encontró en el pop un lugar en el que poder expandir su creatividad sin por ello perder su esencia. De ahí al vivo, la apuesta se duplica por completo: “Pensando en cómo podría sonar en vivo, es claro que se abren muchas posibilidades. Podemos jugar a otras cosas y ponernos en otra pose. No me parece que sea solo para este disco, porque abre puertas para trabajar con otros artistas: el pop es muy amplio y me gustaría seguirlo desarrollando en mis términos”.
Y esto es muy importante para entender quién es LatinGeisha: una artista que no está dispuesta a que la encasillen. “Yo entro y salgo de la caja cuando quiero”, dice con una sonrisa. Casi de forma automática, la conversación entra en los terrenos del algoritmo, de la música pensada como challenges de TikTok y de la tiranía de una industria que a veces fuerza a los artistas a ir por caminos poco genuinos en pos de obtener reproducciones y likes.
“O sea, si comen con eso y les va bien, bárbaro por ellos, obvio. Pero hay algo ahí que es olvidarse de la pata musical. Hay cosas que no responden a la música. Por ejemplo, con los challenges de TikTok pasa eso de que tenés un pedacito de una canción pegada en tu cabeza sin haberla escuchado completa. Y tal vez ese artista se llenó de plata y está todo bien, nosotros ya estamos en ese circuito y sabemos que va a seguir pasando”.
Su invitación es a seguir apostando por lo orgánico, “por esas cosas que te invitan a escuchar más después de ese momento”. Porque para ella, la viralidad no tiene que ser el punto de partida de una canción sino una consecuencia de que ese trabajo sea muy bueno: “No se puede arrancar a componer pensando en cómo va a ser el TikTok. Eso es algo que hace mucha gente y que me parece re triste. Es un panorama desalentador porque no te invita a escuchar, a enriquecer el oído”.
A lo largo de El año del dragón, la banda de LatinGeisha brilla por completo, algo que ella comenta con orgullo y que abre otro debate. ¿Está bien que un artista de rap y/o trap toque en vivo con una banda como la gran mayoría lo hace hoy día? ¿O hay, como muchos sostienen, una pérdida de esencia?
“En mi caso siempre potencia, porque es mi energía contra la de cinco artistas y esto genera un montón de cosas que con una pista nunca va a pasar. Pero tenemos que dejar de separar al hip-hop de la música, porque siempre van de la mano, se complementan desde los inicios”. Ejemplo perfecto de esto son “Blindado” y “Llamaste a las 4 AM”, dos canciones con puntos de partida diferentes, pero que transpiran hip-hop porque cuentan una historia que no es más que la realidad misma.
Lo interesante es que “Blindado” desnuda las miserias de esos artistas que dicen tenerlo todo en sus publicaciones de redes sociales, pero que lo único que tienen es un imperio de plástico. “Me gustó la idea de reinterpretar visualmente eso de que el trap es todo ostentación -cuenta Jordán-. El trap a mí me encanta, escucho mucho el de afuera y quise ver cómo podía trasladar eso que se ve allá a mi lenguaje. Quise poner en perspectiva que hay mucha falsedad en la vida de los que están supuestamente re pegados. No todo es tan así como parece, así que jugamos con el hecho de que se tenía que ver que era todo de mentira, todo de cartón”.
LatinGeisha pasa de esta especie de contrafronteo a un mensaje igual de sentido y profundo en “Llamaste a las 4 AM”, tema en el que quiso “escribirle una carta a esas personas que en mi historia se quisieron aprovechar de mí”. De eso se trata: de contar qué es lo que está pasando tanto dentro nuestro como frente a nosotros. Una intención que podría aplicar a cualquier género musical, pero que en el universo del hip-hop tiene el doble de peso y de significado.
En ese sentido, ¿creés que el mainstream argentino perdió la capacidad de contar lo que está pasando?
Sí, creo que el mainstream la perdió hace rato. Pero eso pasa por lo que llega al mainstream: yo escucho cosas que hablan de esa realidad, pero que lamentablemente no comparten podio con la Rosalía. Es cierto que en el hip-hop cada tanto hay luces, como Trueno tirando en alguna barra algo de lo que está pasando. Pero para la realidad que estamos viviendo en la Argentina nos estamos quedando re cortos. Siento que hay mucho contenido vacío que no profundiza en casi nada. Mirá, lo más distinto que encontré fue el disco nuevo de Tini que, a pesar de no consumirla, me gustó que tocase otras temáticas.
“Lloran” habla muy en concreto de lo que está pasando en el país y le pone voz a los que siempre son invisibilizados por el poder. ¿Cómo ves a la música en cuanto herramienta para transformar la realidad? ¿Cómo analizás lo que les pasó a Lali, por ejemplo?
La música es una herramienta transformadora en lo social, esto es algo indiscutible a esta altura. Lo que le pasó a Lali me parece una aberración porque hablamos de artistas diciendo lo que piensan. Me preocupa que se castigue, persiga y violente a un artista por eso. Me hace acordar a épocas muy oscuras y lo avalamos como sociedad. Como artistas tenemos que seguir pronunciándonos, pero en la que se pueda. No es que hay que estar todo el tiempo bardeando, tenemos que ayudar a pensar más allá de la polarización clásica.
El elogio para Lali se extiende y Jordán ofrece un análisis un poco más profundo que lo que se suele encontrar en el terreno mediático tradicional: “Me imagino que para Lali debe haber sido muy difícil y también me parece que lo que hizo fue para aplaudir. Si nos callamos estamos complicados: el arte es mucho más que un negocio. Siempre ofreció mucho más que una plataforma para ganar plata, siempre nos ayudó a pensar. Si alguien tiene herramientas y tiene algo para decir, bienvenido sea”.
LatinGeisha se presenta el viernes 13 de septiembre a las 19 h en Uniclub (Guardia Vieja 3360, CABA), entradas disponibles a través de Alpogo. Escuchá El año del dragón en plataformas de streaming (Spotify, Tidal, Apple Music).
