El encierro en épocas de pandemia provocó que el tiempo que pasamos en las redes sociales haya aumentado bastante. En los últimos días se viralizaron unos videos de grandes hits del pop y el rock en formato “8D”, un nombre ambicioso que a primera impresión despierta la curiosidad de cualquiera. La única consigna de estos videos es usar auriculares para notar la diferencia con el formato original.
Andrés Mayo, el prestigioso ingeniero de audio argentino que trabajó con muchos de los artistas más grandes de Latinoamérica (entre ellos Gustavo Cerati, Luis Alberto Spinetta, Charly García y Fito Páez), nos cuenta que “8D es un invento de marketing, es algo que no tiene ninguna explicación posible. Nadie que yo conozca sabe a qué hace referencia. La única explicación que le puedo encontrar es que alguien dijo: ‘Bueno, si 3D es mucho, 8D es mucho más.’ Si lo tuviéramos que nombrar profesionalmente sería Audio 360, eso es lo que verdaderamente es y es algo que existe hace un montón de tiempo. Se empezó a desarrollar en los años 70 en Inglaterra pero en ese momento no había demasiadas posibilidades de aplicación porque tenías que tener un sistema de parlantes muy complejo en tu casa para poder escucharlo. Entonces era más para otro tipo de aplicaciones científicas. Pero ahora con los auriculares y la posibilidad de viralización que nos han dado las redes, podés convertirlo en un audio estéreo. Sin embargo tiene propiedades binaurales, eso hace que vos lo puedas escuchar en tus auriculares y que tengas la sensación de que es como una esfera que está por fuera de tu cabeza.”
Acá hace algunos años, se organizan escuchas de discos en parlantes holofónicos. Ambas son ilusiones auditivas, ¿pero cuál es la diferencia con el Audio 360?
En realidad están basadas en el mismo principio. Lo que pasa es que el sonido holofónico es básicamente una técnica de captura, o sea de grabación. Y cuando hablamos de Audio 360 nos referimos a algo que incluye varias técnicas, por ejemplo la binauralidad, ambisonic y otras formas de procesamiento de audio o software que son bastante complejas. No quiere decir que estemos hablando de cosas totalmente distintas, si no que en todo caso “Audio 360” es un término más abarcativo que el sonido holofónico. El sonido holofónico es una de las formas de generar una ilusión auditiva en el cerebro. Pero hay otras.
Trabajás con Audio 360 y realidad virtual. En tu proyecto 360 Music Lab están por editar el primer compilado de música 100% producida en 360. ¿En qué parte del proceso están?
El proceso empezó hace casi tres años, medio por casualidad porque yo tenía bastante contacto con desarrolladores de Audio 360 en distintas partes del mundo pero no había visto música desarrollada en este formato. Entonces, junto a mi colega Martín Muscatello, empezamos a investigar de qué forma podíamos encontrarle una vuelta musical a esto. Porque lo que teníamos hasta ese momento eran casi como demostraciones de producto. Cosas en las que escuchás el audio girando por todos lados pero no es en absoluto musical. Usar esta tecnología para que el resultado sea musical nos pareció una buena idea. Estuvimos por lo menos dos años experimentando con distintas herramientas, con micrófonos ambisonic, con cabezas binaurales y micrófonos específicos. Hicimos un montón de pruebas y llegamos a la conclusión de que había una forma de convencer a los dos tipos de oyentes: el especializado y el no especializado. El oyente no especializado lo que quiere es notar la diferencia, si no es como que no cambia respecto a una mezcla común. Y si no hay mucha diferencia realmente no lo percibe. Lo contrario le pasa al oyente especializado que sabe la diferencia y si todo se mueve por todos lados no le genera ningún atractivo porque le parece aburrido, le parece poco interesante. Entonces fuimos encontrando manera de hacer algo que convenciera a las dos partes y llegamos a algo que para mí está muy bueno y después de mucho tiempo puedo decir que estoy orgulloso de lo que hicimos.
¿Cuándo vamos a poder escuchar el disco?
El 17 de abril sale el primer corte en Spotify y vamos a hacerle bastante difusión justamente para tratar, de alguna manera, no de combatir el 8D si no mostrar simplemente las diferencias. El primer corte es de Proyecto Gomez Casa con feat de Lula Bertoldi. El tema no solo está buenísimo, sino que se presta mucho para esto que estamos haciendo y creo que la vuelta que le encontramos es algo que debería, por lo menos en primera instancia, sorprender y demostrar una nueva forma de hacer las cosas. Esa es la sensación y la esperanza que tengo.