Quince años pasaron desde que Yann Tiersen se hizo famoso mundialmente gracias a sus obras para piano y acordeón que musicalizaron la archi-conocida película francesa Amélie. Lo que muchos aún no saben es que esa banda sonora fue extraída de trabajos previos de Tiersen, quien años antes de la salida de la película de Jean-Pierre Jeunet ya había lanzado aquellas composiciones en sus cuatro primeros álbumes La valse des monstres (1995), Rue des cascades (1996), Le phare (1997) y L’absente (2001). Así, las piezas musicales que integran el soundtrack de Amélie no tenían en principio ningún afán por representar la esencia parisina, pero lo hicieron y el músico francés –sin quererlo- quedó asociado por largo tiempo a la romántica capital.
Lo loco de esta asociación es que Tiersen no la quería en absoluto. Alejado de las grandes ciudades, el también compositor de la banda sonora de Goodbye Lenin! vive desde hace años en una pequeña isla de 8×4 kilómetros llamada Ouessant y desde allí milita a través de su música por un mundo menos capitalista, más local, íntimo y conectado con su medioambiente. Con EUSA (Ouessant en idioma bretón), su más reciente disco lanzado a principios de éste año, Yann Tiersen buscó concretizar de manera musical la isla en la que vive y dar una declaración política de lo que esto significa para él a través de 10 piezas para piano. Afirma Tiersen a Indie Hoy:
“Con EUSA quiero compartir un poco del ecosistema de donde vivo, hablar de ser local. Eso es lo que quiero compartir con la gente. No quiero que ellos se sientan en casa porque no es su casa. Yo quiero compartir mi casa con ellos, porque es la única cosa real que puedo compartirles”.
La idea de hacer de su casa una obra de arte fue llevada a cabo a través de la elección de diez lugares de Ouessant, escucharlos, hacer grabaciones de campo y dibujarlos. De eso surgieron diez partituras, diez piezas musicales, diez grabaciones de campo y así, EUSA. Ante la pregunta de qué debe tener un lugar para inspirarlo a hacer música, Tiersen titubea y finalmente responde: “No es una cuestión de inspiración, más bien hablo de mi isla porque es lo que conozco. Lo más importante en estos días es la ecología, luchar por el medioambiente. Es lo único que tenemos que hacer, y yo uso mi música para eso, porque estamos enfrentando el fin del mundo y eso es muy preocupante. Tenemos que compartir nuestros lugares y cuidar los ambientes, porque nadie lo va a hacer a escala global, entonces hagámoslo nosotros en pequeña escala” y agrega que “ser parte de la comunidad es importante. Yo vivo en una isla y éste es un lugar donde se pueden preservar cosas. Es como un pequeño mundo y hay que cuidarlo”.
La conversación con Yann Tiersen sucede al mismo tiempo que las apocalípticas elecciones presidenciales de Estados Unidos, y el tema inevitablemente sale a flote entre tanta preocupación por el planeta. La negativa del músico frente a Trump es fuerte y latente: “Donald Trump es un hombre horrible, muy estúpido, racista y una amenaza para el mundo. Estoy muy preocupado acerca de su posición sobre el cambio climático. Todo es horrible, porque puede llegar a tomar decisiones muy malas para el mundo. Me pone muy triste y realmente me asusta”, comenta con una angustia que no disfraza y además comenta que tiene conciertos agendados en los Estados Unidos y que no sabe qué le dirá a la gente.
Antes de lanzar EUSA, Yann Tiersen se encontraba tocando su música con una banda de siete personas. Hoy atraviesa un período más íntimo en el que confiesa no querer salir demasiado de Ouessant, haciéndolo solo de vez en cuando por cortos lapsos de tiempo para llevar su música a otras latitudes, práctica que hoy realiza sin más compañía que su piano: “Extraño a mis compañeros de banda, porque es muy divertido ser siete en el escenario y estar viajando así. Cuando uno viaja solo está más expuesto y más sensible, eso a veces hace que te metas más en la música. Es como más parecido a la vida cotidiana, uno puede protegerse más, estar solo. Ambas instancias son geniales. Me encanta estar haciendo el tour de EUSA porque es un tour corto. Hago varios conciertos pero en un corto lapso de tiempo porque necesito estar en casa mucho éste año”.
A pesar de que según sus palabras disfruta mucho de Latinoamérica, su gente y su música (en la entrevista admitió encantarle la banda chilena Los Jaivas y el músico brasilero Gui Boratto), de su vuelta a nuestro continente no se sabe mucho y el músico parece no tener demasiada preocupación por el tema: “Quizá el próximo año vaya, pero últimamente no estoy queriendo salir mucho de casa”, sentencia.