El mundo de la brujería es milenario y ha formado parte de todas las culturas, pero siempre dentro de lo oculto y lo clandestino. Además, a lo largo del tiempo, cientos de estrellas, políticos y figuras públicas fueron relacionadas con la brujería, lo que ha signado sus carreras.
Desde Grunge recolectaron las historias de algunos músicos que fueron relacionados con la brujería, la mayoría mujeres, lo cual no llama la atención si hacemos un análisis histórico en el que miles han sido identificadas como brujas y por ello castigadas y/o ejecutadas.
A continuación, tres músicos/as que fueron relacionados con la brujería.
Beyoncé
En 2018, la baterista Kimberly Thompson puso una orden de restricción contra Beyoncé alegando que utilizaba magia negra. La mega artista no ha hablado públicamente de ello, pero su excompañera y colega sí: “No ha podido dejarme ir, no ha podido dejarme progresar como una mujer madura y trabajar con otra gente. Básicamente, ha hecho todo para dañar cualquier tipo de felicidad que podría haber tenido”.
David Bowie
El excéntrico cantante pasó uno de lo momentos más turbulentos de su vida en los años 70, cuando estaba luchando con adicciones y sostenía que era víctima de una maldición, tal como le dijo a su tour manager, Cherry Vanilla.
Sobre este tema, Vanilla expresó: “Me pidió que le consiguiera un mago blanco para liberarse de esta maldición. Lo decía en serio. Yo de hecho conocía a alguien en Nueva York que decía ser una maga blanca. Ella era la única que conocí. Así que los puse en contacto. No sé qué pasó con ella y no sé si le quitó la maldición, creo que sí”.
Stevie Nicks
La cantante de Fleetwood Mac fue relacionada con la brujería sobre todo luego del gran éxito del disco Rumours de 1977. Su forma de vestir, su desempeño en el escenario y el hecho de que se autoidentificara como una “Mujer araña” llevó a la prensa a llamarla bruja.
En 2014, la cantante habló sobre este tema en una entrevista con Los Angeles Times: “Al comienzo de mi carrera, la idea de que alguna gente chiflada escribiera ‘¡eres una bruja, eres una bruja!’, era muy llamativa. Y ahí estaba yo como ‘¡No, no lo soy!’ Simplemente me visto de negro porque me hace ver más flaca, idiotas”.
