David Bowie fue un artista con múltiples facetas que exploró más estilos que cualquier otro músico contemporáneo. Conocido por no conformarse y siempre probar cosas nuevas, con el tiempo fue volviéndose crítico con sus composiciones más viejas, catalogando algunas de ellas como “errores”.
Como el mayor crítico de su trabajo, este perfeccionismo impulsó su carrera, desde sus inicios hasta su etapa más cerebral y experimental. Al encontrar su rumbo en los años 70, Bowie siguió innovando y criticó algunas de sus propias canciones, considerándolas por debajo de sus altos estándares.
A continuación te mostramos 4 canciones odiadas por David Bowie.
“Young Americans”
La canción que Bowie más aborrecía de su repertorio era “Young Americans”, el tema principal de su álbum homónimo de 1975. A pesar de ser una canción bastante optimista que destaca en el catálogo de Bowie, él afirmaba abiertamente que la “detestaba” y que el único tema que le gustaba de todo el álbum era “Win”.
“Space Oddity”
Bowie despreciaba “Space Oddity”, su gran éxito de 1969. Incluso su productor, Tony Visconti, la llamó “barata” y un “truco” aprovechado de la carrera espacial. Ambos bromeaban sobre cómo se convirtió en un éxito, pese a no tener fe en ella al principio.
Bowie interpretó la canción durante la gira Diamond Dogs en 1974, pero fue olvidada hasta que la revivió para las fechas récord de la gira Serious Moonlight en 1983. Por supuesto, más tarde suavizó su postura sobre el tema y lo calificó de “muy bueno” pero demasiado prematuro porque en ese momento no tenía material de peso para seguirlo.
“Too Dizzy”
A finales de los 80, Bowie tocó fondo en su carrera. Tras el éxito de Let’s Dance en 1983, perdió impulso creativo y se desilusionó con el lado comercial de la industria. Never Let Me Down (1987) fue su punto más bajo y él mismo lo llamó “horrible”.
Particularmente, de ese material odiaba “Too Dizzy”, coescrita con Erdal Kizilcay, ya que su sonido, muy influenciado por el estilo “yuppie” de la época, estaba lejos de su estilo habitual.
En una entrevista con Music & Sound Output en 1987, declaró sobre el tema: “¡Es desechable! Siempre pensé que era mejor para Huey Lewis [risas]. No me sentía cómodo con esa canción, pero de todas formas está en el álbum”.
“The Laughing Gnome”
“The Laughing Gnome” fue una rareza en su catálogo. Aunque se convirtió en un tema de culto para los fanáticos y tuvo un éxito moderado tras su reedición de 1973, fue un recordatorio de la desesperación de Bowie por hacerse famoso.
Reflexionando sobre este tema con Q en 1990, Bowie dijo: “Aarrghh, Dios, esas cosas al estilo Anthony Newley, qué vergüenza. No, no tengo mucho que decir a su favor. Líricamente, supongo que intentaba ser algo, el narrador de cuentos cortos. Musicalmente es bastante bizarra. No sé en qué estaba pensando“.