Durante su formación como músico, Dave Grohl tuvo un sinfín de influencias. Algunas de las más fuertes eran las bandas que componían la escena hardcore de Washington D.C., así como también leyendas del rock and roll de la talla de Led Zeppelin y Black Sabbath. Sin embargo, el líder de Foo Fighters reconoció en alguna oportunidad que hubo un álbum en particular que lo llevó a convertirse en baterista.
El disco en cuestión es Let’s Dance de David Bowie, que se lanzó a la venta el 14 de abril de 1982 a través del sello EMI America. Con canciones como “Let’s Dance”, “China Girl”, “Modern Love” y “Without You”, el LP se convirtió en un éxito comercial, alcanzando el número uno en numerosos países.
La inspiración de Dave Grohl
En una entrevista publicada en YouTube, el exNirvana se deshizo en elogios para con su colega y comentó: “Los pósters que tenía en la pared de mi habitación eran de Led Zeppelin, The Beatles y cosas así. Pero había algo en Bowie que me hacía pensar: ‘No estoy seguro de si es de este planeta o no’, y me encantó”.
Sobre el disco, Grohl dijo: “La mayoría de los puristas de Bowie se inclinan por los primeros días, pero diré que mi álbum favorito de Bowie es Let’s Dance. Es una obra maestra. Como baterista, esa fue una de las cosas que me inspiró a tocar la batería. Así que él era especial porque podía pasar de un género a otro y viceversa”.