En la historia de la música, y sobre todo del rock, hay anécdotas que parecen más propias de la ficción que de la realidad. De hecho, una de las más extrañas involucra a dos gigantes del género: Bob Dylan y Neil Young. En un relato que parece sacado de una comedia surrealista, Dylan estuvo cerca de morir en la parte de atrás del coche fúnebre de Young; un vehículo que, por razones tan enigmáticas como su dueño, jugó un papel inusual en la vida de estos músicos.
Como mencionaría el propio Young, su decisión de ser propietario de un automovil diseñado para transportar muertos fue porque era práctico e ideal para las giras. Con amplio espacio en la parte trasera, era perfecto para jovenes músicos itinerantes. Además, permitía que varias personas se relajaran en su interior sin ser vistas, gracias a las cortinas que lo cubrían. Para Young, “Mort” -como lo bautizó- era parte de su identidad, “como un vaquero con su caballo”.
Pero el coche fúnebre no solo sirvió a Young, pues también atrajo la atención de Dylan durante una visita al rancho de su colega. Cansado y buscando un lugar para descansar, Bob tomó la extraña decisión de meterse en la parte trasera del coche fúnebre para tomar una siesta. Este acto, aparentemente inocente, casi se convierte en una tragedia.
Un susto que podría haber terminado en tragedia
Más tarde ese día, Sandy Mazzeo -un amigo de Young-, decidió dar una vuelta en el coche. Sin saber que Dylan estaba durmiendo en la parte trasera, comenzó a conducir hasta que escuchó ruidos fuertes y gemidos que emanaban desde atrás. Asustado, pensó que estaba siendo acosado por un fantasma, solo para descubrir que era Dylan, enredado en su turbante deshecho, luciendo como una momia que acababa de salir de su tumba.
La historia no termina allí. El susto casi provoca que Mazzeo pierda el control del coche, lo que podría haber resultado en un accidente fatal. Sin cinturón de seguridad en la parte trasera, Dylan estuvo peligrosamente cerca de sufrir un destino terrible. Sin embargo, el músico logró aclarar la situación antes de que ocurriera lo peor, y la historia terminó convirtiéndose en una de las muchas anécdotas extrañas que han marcado su vida.