Michael Stipe siempre fue un gran fanático de la música. Incluso mucho antes de formar su propia banda y, posteriormente, saltar al estrellato mundial con R.E.M., el estadounidense disfrutaba del cuarto arte desde una edad temprana.
Entre los tantos géneros con los que Stipe se fanatizó se encuentra el punk, especialmente durante su adolescencia y juventud, época en la que acudía a Patti Smith y otros artistas de la escena CBGB neoyorquina como su refugio.
Cuando Stipe tenía 20 años, el grupo The B-52’s debutó con su álbum homónimo en el que mezcló géneros como el new wave, el post-punk, el dance-rock, surf rock y college rock, dando como resultado un disco que, según el propio ex R.E.M., nunca obtuvo su debido reconocimiento.
Un disco que cambió todo para Stipe
Durante una entrevista con Pitchfork en 2021, Stipe afirmó: “Ese primer LP de B-52’s todavía no recibió el reconocimiento que merece como uno de los discos más innovadores e influyentes de todos los tiempos, sin duda para mí y para todos los que rodean la escena de Athens“.
Acto seguido, el cantautor agregó: “Cuando todos los punks de Nueva York todavía se ponían alfileres de gancho en las mejillas, los B-52 decían: ‘Bueno, eso es lo que ellos hacen y esto es lo que nosotros hacemos, de esta manera en particular’. Era simplemente tierra arrasada”.