Dave Grohl, reconocido por su trayectoria como baterista de Nirvana y líder de Foo Fighters, ha expresado en más de una ocasión su admiración por “My Sharona” de The Knack. Para él, esta canción no es solo un “one hit wonder” sino una obra maestra con un riff inolvidable y una historia que va más allá de lo común.
A pesar de ser el arquetípico éxito radial, “My Sharona” no es simplemente una canción con suerte en las listas de popularidad. Se trata de una declaración de amor obsesiva, inspirada en un flechazo fulminante que terminó con un desenlace inesperado. A continuación te contamos su historia.
Cómo y cuándo surgió
El tema fue editado el 18 de junio de 1979, pero su génesis se remonta a mucho antes, cuando el guitarrista Berton Averre ideó su icónico riff de guitarra. Este ostinato, con su inconfundible sucesión de notas repetitivas, esperó el momento adecuado para cobrar vida. Y lo encontró con la línea de bajo de Prescott Niles y la composición del vocalista Doug Fieger, quien escribió la letra en apenas 15 minutos.
En una ocasión, Fieger confesó de forma polémica que la canción nació tras conocer a una joven de 17 años, Sharona Alperin, cuya belleza, según dice, lo dejó enamorado. “Fue como recibir un golpe en la cabeza con un bate de béisbol. Me enamoré de ella inmediatamente”, recordó el músico.
Con el éxito arrasador del tema en el disco Get The Knack, Alperin, tras escuchar su nombre resonar en todas las emisoras de radio, terminó posando para la carátula del single y dejando a su entonces novio para irse de gira con la banda. La relación con Fieger duró tres años hasta que ella decidió partir.
La fascinación de Grohl por “My Sharona” se remonta a los tiempos de Nirvana y perduró a lo largo de su carrera con Foo Fighters. De hecho, ha interpretado la canción en reiteradas oportunidades, ya sea en formato banda o junto a Greg Kurstin para las Hanukkah Sessions.