Janis Joplin y Jim Morrison fueron dos artistas que marcaron a fuego una época. Ambos nacieron en 1943 y fallecieron en 1970 y 1971, respectivamente, con tan solo meses de distancia, convirtiéndose así en dos miembros del infame club de los 27.
Claro está, debido a su fama y al hecho de ser contemporáneos, Joplin y Morrison inevitablemente se cruzaron en alguna que otra oportunidad, pero esos encuentros no fueron para nada gratos, al menos para la oriunda de Texas.
Según recuerda Far Out Magazine, la primera vez que la cantante y el líder de The Doors se vieron las caras personalmente fue a finales de los años 60, en una fiesta del productor Paul Rothschild. Durante la velada, la dupla de rockeros tuvieron una conversación que inició amablemente, pero terminó en caos.
El primer incidente entre los artistas
Según el relato, Joplin conoció al Morrison que se escondía detrás de su imagen pública y salía luego de ingerir alcohol. De hecho, Rothschild lo atestigua, recordando que el cantante se convirtió en “un cretino, un borracho repugnante” en esa fiesta.
Janis pidió que la llevaran de regreso a su hogar. Sin embargo, una vez dentro del auto, Jim supuestamente metió la mano en la ventana, la agarró del pelo e intentó acercarla hacia él. Fue por eso que la artista no dudó en arrojarle un vaso.
Un nuevo encuentro y otro comportamiento repudiable de Morrison
Tiempo después, el dúo se volvió a encontrar en The Scene, lugar en el que se estaba desarrollando una sesión de improvisación. En aquella oportunidad, Jimi Hendrix estaba tocando, Joplin estaba entre el público y, de repente, entró Morrison, lo que generó una gran tensión.
“Jim se acercó a donde estábamos sentadas Janis y yo y, sin ninguna provocación previa, simplemente le tiró el cabello hacia el suelo“, recordó un miembro del público. La reacción de Joplin no se hizo esperar: terminó revoleándole una botella.
“Si mencionabas el nombre de Jim, ella decía: ‘Ese imbécil’”, recordó un publicista de su sello. “Ella no iba a soportar su comportamiento infantil, repugnante y grosero dondequiera que lo encontrara. La irritaba”.