A lo largo de su meteórica carrera, los Beatles no solo revolucionaron la música sino que también vivieron situaciones que los pusieron en contacto con la policía. Aunque la mayoría de los episodios fueron más anecdóticos que graves, la relación de los muchachos de Liverpool con la ley estuvo marcada por una serie de arrestos que, a pesar de su relevancia, no empañaron su imagen pública.
¿Cuántas veces fueron arrestados los Beatles?
Hubo nueve ocasiones diferentes en las que los Beatles tuvieron problemas con la ley. El primer encontronazo serio ocurrió en 1960, cuando la banda se encontraba en Hamburgo, Alemania. En ese entonces, Paul McCartney y el baterista Pete Best fueron arrestados y deportados del país bajo sospecha de incendio provocado.
Lo que sucedió fue un accidente mientras los jóvenes músicos intentaban improvisar una vela para iluminar un cuarto en el que estaban tocando. La vela casi causó un incendio, lo que llevó a la detención de McCartney y Best. Aunque el incidente fue más un accidente de juventud que un acto delictivo intencional, fue suficiente para que las autoridades alemanas los deportaran.
En 1968, en el apogeo de su fama, los problemas legales resurgieron. John Lennon y su esposa Yoko Ono, que estaban de visita en el departamento de Ringo Starr, fueron involucrados en un allanamiento de la policía. El motivo: drogas ilegales. Aunque las autoridades no encontraron pruebas de posesión de drogas, este incidente reflejó el creciente vínculo entre los Beatles y el consumo de sustancias, que se convirtió en una constante en sus vidas.
¿Qué Beatle fue arrestado más veces?
Si bien todos los miembros de la banda tuvieron algún encuentro con la policía, McCartney ostenta el título del Beatle con más arrestos, principalmente debido a su relación con las drogas. Los arrestos estuvieron casi siempre ligados a la posesión de marihuana.
Uno de los incidentes más curiosos, según recuerda Far Out Magazine, ocurrió en 1973 después de la disolución de la banda. McCartney, quien había mostrado un creciente interés por la jardinería, recibió por correo semillas enviadas por sus fanáticos.
Sin saber exactamente qué tipo de plantas eran, las sembró en su jardín, solo para descubrir que eran semillas de marihuana. La policía no tardó en llegar y, aunque McCartney explicó que no sabía lo que estaba cultivando, fue multado con 175 dólares.