El 8 de julio de 2023, Elton John dio su último concierto en la ciudad sueca de Estocolmo, cerrando así su tour final. Sin embargo, el cantautor y pianista sigue en actividad después de más de 60 años, tiempo suficiente para hacerse con una legión de fanáticos a lo largo y ancho del mundo.
Entre los tantos amantes de la obra del británico se encuentra Dave Grohl, quien en una entrevista con el Sunday Times en 2021 recordó cómo fue la primera vez que, junto a su hija, su esposa y su amigo Dave Koz, se cruzó con John en Londres.
“Elton salió de una boutique justo frente a nosotros y se subió a un auto que estaba esperando”, contó. “Todos nos detuvimos y nos preguntamos: ‘¡Mierda! ¿Viste eso?’. Era el maldito Elton John. Y estaba sentado en un auto estacionado a solo unos metros de donde estábamos parados”.
Un saludo que no se va a olvidar nunca
En ese momento, el amigo de Dave le comenzó a insistir para que se acercara a saludar, pero él tenía sus dudas al respecto: “Me reí y dije: ‘¡No conozco a Elton John, carajo! ¡Y él seguro que no sabe quién soy yo!’”. Acto seguido, el auto en el que se trasladaba John se detuvo y el músico bajó.
“Se me acercó con esa gran sonrisa que mostraba los dientes y me dijo: ‘Hola, Dave, encantado de conocerte’”, recordó Grohl. “Casi se me cayó la sonrisa de la cara. Era tan grande. Le presenté a mi esposa Jordyn y Dave, y él se inclinó y le dio un beso a mi hija Violet antes de volver corriendo y alejarse a toda velocidad”.
El día que colaboraron juntos
Tiempo después de aquel cruce, la dupla se encontró en un estudio de grabación cuando colaboraron en el disco …Like Clockwork de Queens of the Stone Age. Elton llegó a la sesión con el cantante Engelbert Humperdinck y al entrar a la sala preguntó: “Bien, chicos, ¿tienen una balada para mí?”, por lo que le hicieron escuchar el tema que habían preparado para la ocasión.
“Que alguien entrara y aprendiera una canción tan complicada de inmediato era una tarea enorme”, aseguró Grohl. “Pero él se sentó detrás del piano y trabajó en ella hasta que le salió bien, toma tras toma, siempre perfeccionista, demostrando por qué es la perra reina del rock and roll”, dijo. Este término lo popularizó David Bowie con su canción “Queen Bitch” de 1971.