Después de haber formado parte de The Beatles durante la década de los 60, Paul McCartney pasó el resto de su carrera colaborando con diversos artistas de géneros distintos. Sin embargo, con casi ninguno de ellos hubiera formado una banda, excepto con uno: Nirvana.
Así como Kurt Cobain, Krist Novoselic y Dave Grohl manifestaron en varias oportunidades su fanatismo por la música de los Fab Four, Macca confirmó que, si hubiera tenido la chance de unirse a una banda, habría sido a la de las leyendas del grunge. “Hubiera sido Nirvana, pero ya no”, dijo el cantautor británico.
El día que cumplió el sueño
Sin embargo, el oriundo de Liverpool cumpliría su sueño el 12 de diciembre del 2012, fecha en la que se llevó a cabo, en el Madison Square Garden de Nueva York, el concierto benéfico 12-12-12: The Concert for Sandy Relief.
Allí, McCartney se unió a Grohl, Novoselic y Pat Smear para interpretar “Cut Me Some Slack”, canción que en 2013 integró Sound City: Real to Reel, la banda sonora del documental dirigido por el actual líder de Foo Fighters. “Finalmente me cayó la ficha y entendí que estaba en medio de una reunión de Nirvana“, dijo Paul antes de dar la bienvenida a sus colegas al escenario.