A diferencia de John Lennon, George Harrison y Paul McCartney, Ringo Starr no fue uno de los miembros originales de The Beatles, sino que se sumó unos dos años y medio después de la formación de la banda.
Tras la salida de Pete Best, Ringo pasó a integrar el conjunto británico, pero cuando llegó la hora de grabar “Love Me Do”, el single debut, el legendario productor George Martin todavía no confiaba al 100% en él, por lo que grabó dos versiones del track. Una de ellas tenía a Starr detrás de la batería y en la otra fue reemplazado por su colega Alan White.
Lo curioso de la situación fue que Martin terminó utilizando ambas pistas: la que tuvo a White como participante se puede escuchar en el disco Please, Please Me, mientras que la de Starr se utilizó como single en 1962.
“George Martin quería un baterista profesional”, contó Ringo en un diálogo con Paste en 1977. “Principalmente porque cuando hicimos el ensayo de Please, Please Me, yo estaba tocando la pandereta en una mano, la maraca en la otra y el bombo y el hi hat”.
Acto seguido, el batero continuó: “Esta cosa loca, tratando de sacudir y golpear los platillos con la maraca. Aplastaba este gran platillo con una maraca. Y George me miraba y decía: ‘¿Ah, sí? Tenemos a un loco por acá. Por eso trajo a Andy White”.
Sin lugar a dudas, la decisión de Martin hizo que la relación con Starr comenzara con el pie izquierdo: “Es una canción muy simple. Puedo hacerlo. Pero George no lo quería en ese momento. Era inseguro. Quería incluir a un verdadero músico. Fue una de las cosas más tontas que hicimos”, sentenció.