La carrera de Pink Floyd está poblada de álbumes icónicos. El grupo, que llevó a cabo una gran experimentación desde el rock psicodélico y progresivo, marcó la diferencia con sus contemporáneos. Entre sus discos más destacados están The Dark Side of the Moon, Wish You Were Here y The Wall.
The Wall se lanzó en 1979 y cobró gran importancia en la cultura popular por sus canciones y la película dirigida por Alan Parker, una propuesta audiovisual tan disruptiva como la de la banda. Este disco, además de narrar la historia de un hombre atormentado, es una fuerte crítica social al sistema educativo, a los horrores de la Segunda Guerra Mundial y la alienación del ser humano.
Entre las canciones más reconocidas de The Wall se cuentan “Another Brick in the Wall Part 2” y “Combortably Numb”. Para muchos, es el mejor disco de la banda, y su concepto estuvo ideado fundamentalmente por Roger Waters. En este sentido, el bajista considera que se trata de un disco casi perfecto: “The Wall es realmente la cosa de la que más orgulloso estoy. Creo que no tiene defectos”.