En el cumpleaños número 73 de Iggy Pop recordamos tres de los mejores discos de sus extensa carrera. Luego de The Stooges, Pop creó una prolífica carrera que lo mantiene hasta el día de hoy siendo uno de los más respetados músicos e influencias para todos los géneros, aunque el que más lo identifica es el punk.
Nacido bajo el nombre de James Newell Osterberg, Jr., ha sido controversial tanto desde su puesta en escena -inmortalizando su marca del torso desnudo, rabioso y siempre innovador-, como desde sus composiciones. También tuvo sus destellos en el cine y colaboró con incontables músicos.
Iggy Pop es la sexualidad denostada, la música despojada y novedosa, una figura que supera su carrera y el icono de un rock alternativo que ha abrevado tanto de Jim Morrison como de Mick Jagger y David Bowie.
A continuación repasamos tres de sus discos más icónicos en su carrera solista:
Lust for Life
1977 – RCA / Virgin
Este álbum lleva el nombre de la canción que lo inaugura y que será uno de los mayores éxitos de Iggy en toda su carrera; el mismo track suena en la apertura del icónico film Trainspotting (1996). Lust for Life significó la segunda colaboración de David Bowie con Iggy Pop y contiene el espíritu punk y provocador del artista, al tiempo que entrega grandes éxitos como “The Passenger”.
The Idiot
1977 – RCA
El primer disco solista de Iggy Pop se erige como un clásico del rock y la música alternativa, fundamental en cualquier ranking. Es la apertura de lo que sería una carrera extendida hasta la actualidad; puede oírse el estilo que perfeccionará a través de diferentes álbumes. El disco contiene la oscuridad de “Nightclubbing” y el frenetismo de “Funtime”, así como el brillo de “China Girl”.
Brick by Brick
1990 – Virgin
El disco abre una nueva década y también un nuevo costado en la carrera de Pop, acercándose más al rock estadounidense no tan ligado a la oscuridad de su punk rock primigenio. Este álbum alberga éxitos como “Candy”, con Kate Pierson de B-52’s de invitada; la colaboración con Guns N’ Roses en “Home”; y el emblemático tema que da nombre al disco.