Hoy 2 de marzo Lou Reed cumpliría 80 años por lo que en esta nota homenajeamos al mítico artista neoyorkino al recordar siete canciones de su autoría.
En cada una de ellas se retrata una faceta de su personalidad, así que exploramos desde su lado más irreverente en “Walk On the Wild Side” y “Rock & Roll” hasta su costado más tierno y romántico en “I’ll Be Your Mirror” y “Satellite of Love”.
Repasamos además temas de su carrera en solitario como de su etapa junto a The Velvet Underground, la agrupación que supo liderar desde mediados de los años sesenta y que terminó fuertemente relacionada con Andy Warhol.
“I’ll Be Your Mirror”
De acuerdo con el biógrafo Victor Bockris, Lou escribió la canción para Nico (Christa Päffgen), quien fue la encargada de cantarla en el disco The Velvet Underground & Nico. Al parecer, el músico y poeta decidió componer esta pieza luego de que ella se le acercara al terminar un recital en 1965 y le dijera: “Oh, Lou, seré tu espejo”. Según muchos allegados del rockero, esta canción era una de sus preferidas y es por ello que la tocaba a menudo junto a su banda. Más aún, después de que Nico dejó la banda a finales de 1967, las voces en vivo de la canción siempre se hicieron imitando el acento de alemán de Päffgen.
“Satellite of Love”
Para Lou no fue nada fácil animarse a hacer canciones en solitario a comienzos de los años 70, pero gracias su trabajo junto a David Bowie en calidad de productor, consiguió grabar este himno luminoso cargado de glam rock y con arreglos de piano, palmas y coros. Y es que el propio Duque Blanco aportó voces para este single. En 2003, Reed reconoció (vía The Guardian): “Me encantaron [los coros] cuando los hizo en mi disco. No es la clase de parte que se me hubiera ocurrido, pero David escucha esos fragmentos, además tiene una voz extraña y él puede subir tan alto y hacer eso. Es muy, muy hermoso”.
“Perfect Day”
Este tema se ha convertido en uno de los más aclamados de la carrera del compositor estadounidense. Algunos críticos aseguran que la clave del éxito de esta obra está en su letra tan dulce y ambigua que nunca nos deja claro si habla sobre un enamoramiento o sobre el uso de una droga tan pesada como la heroína. A nivel sonoro, el arreglo de Mick Ronson y la parte de piano tan excepcional son detalles que convierten a esta balada en todo un clásico del rock del siglo XX.
“Coney Island Baby”
Quizá una de las canciones de amor más conocidas de su carrera, que a su vez se llegó a convertir en un emblema para el movimiento LGBT, pues por entonces Lou posaba para diferentes revistas junto a su novia Rachel Humphreys (nacida como Tommy). En la letra de esta pieza él canta: “But remember the princess who lived on the hill/ Who loved you even though she knew you was wrong/ And right now she just might come shining through” (Pero recuerda a la princesa que vivía en la colina / Que te amaba a pesar de que sabía que estabas mal / Y ahora mismo podría salir a brillar”.
“Smalltown”
En este tema, Reed se une a John Cale tras reunirse en el memorial de Andy Warhol y deciden escribirle esta elegía a su antiguo socio creativo. Para esa tarea, decidieron valerse únicamente de sus voces, un piano, una guitarra y una viola. Sin dejar de lado su estilo crudo, Lou y su viejo colega le rinden tributo a ese joven hijo de inmigrantes eslovacos que salió de Pittsburgh (un pueblo pequeño) y supo convertirse en un mito de la cultura pop a fuerza de disciplina, ambición y talento.
“Rock & Roll”
Aunque esta canción se publicó originalmente en el álbum Loaded de los Velvet Underground en 1970, Reed la incorporó a su repertorio como solista en los años venideros debido a lo mucho que le gustaba interpretarla. En sus estrofas se cuenta la historia de Jenny, una chica cuya “vida fue salvada por el rock”. No obstante, el propio Reed más adelante confesaría que en verdad era una pieza muy autobiográfica: “Se trata de mí. Si no hubiera escuchado rock and roll en la radio, no habría tenido idea de que había vida en este mundo”. Más adelante explicó que ni las películas ni la televisión le abrieron la cabeza, solo la música lo logró.
“Walk on the Wild Side”
Este composición cargada de rebeldía surgió luego de que al líder de los Velvet se le encargara hacer la música para la adaptación en Broadway de la novela de Nelson Algren titulada A Walk on the Wild Side. Y pese a que esa obra teatral finalmente no se concretó, él trabajó junto a Bowie en calidad de productor y sacó adelante este single que se convirtió en su único hit en alcanzar el top 10 en el Reino Unido. El tema está inspirado en toda la comunidad queer y diversa que Reed conoció en la famosa Factory de Warhol.