Después de mucha espera, Charly García publicó su nuevo disco de estudio, La lógica del escorpión. Compuesto por un lado A y un lado B, el más reciente material del músico argentino presenta 13 canciones en total, entre reversiones de temas propios, tracks de otros y canciones inéditas.
El arte de tapa
El disco tiene un arte de tapa que sigue e ilustra la fábula de la rana y el escorpión -en la que se basa el concepto del disco- a partir de una idea original de Charly y los dibujos de Renata Schussheim. La versión física del disco, que salió en vinilo, presenta portada doble, impresiones en dorado con relieves y un sobre interno que incluye las letras de las canciones y la ficha técnica.
Las canciones
El disco contiene 13 tracks en total, divididos en un lado A y lado B (el mismo Charly anuncia el cambio de un lado al otro). Hay temas inéditos, nuevas versiones de canciones propias y covers de grandes artistas como John Lennon y Roger McGuinn de The Byrds.
De Lennon, Charly interpretó una versión en español de “Watching The Wheels”. Si bien ya la había grabado para Kill Gil (2010), ahora la presenta con autorización oficial. De McGuinn hizo una adaptación al catellano de “So You Want To Be a Rock ’n’ Roll Star”, que la llamó simplemente “Rock and Roll Star”. Esta es la canción que cierra el álbum, con Fito Páez como partenaire.
Además, el disco incluye una reversión de “Juan represión” -grabada en 1974 por Sui Generis para Pequeñas anécdotas sobre las instituciones– y “Te recuerdo invierno” -una de las primeras canciones que compuso Charly y formó parte de los primeros ensayos de su banda junto a Nito Mestre-.
Colaboraciones
La lógica del escorpión contó con la colaboración de amigos y colegas del músico argentino como David Lebón, Pedro Aznar (ambos ex Serú Girán) y el mencionado Páez. Sin embargo, otra “colaboración” es la de Luis Alberto Spinetta en “La pelícana y el androide”.
Esta canción fue compuesta por el Flaco en 1984 para el proyecto trunco de álbum conjunto con Charly. En pandemia, García se encontró con los audios de un “disco pirata” suyo mientras navegaba por YouTube, el cual contenía demos de los 80. Ahí descubrió una versión temprana de “La pelícana” con la que terminó obsesionándose.