Britney Spears ya está un paso más cerca de liberarse de la tutela que le impusieron desde 2008. Tras meses de batallar frente a la justicia por recuperar el control de su vida, o al menos hacer que su padre deje de estar al mando de ella, hace unas horas la artista de 39 años fue notificada de que James Spears está dispuesto a renunciar a ser la persona a cargo de su tutela.
No obstante, vale destacar que esto no significa que el progenitor de la estrella pop se hará a un lado de inmediato. De acuerdo con lo reportado por NBC News tras revisar los documentos judiciales correspondientes: “El Sr. Spears está dispuesto a dimitir cuando sea el momento indicado, pero la transición debe ser ordenada e incluir una resolución de los asuntos pendientes ante la Corte”.
Por otra parte, The Times reporta que, de hecho, James no considera que existan razones para destituirlo de su rol de curador, pero que sí considera dejar ese cargo a causa de los “incesantes ataques injustificados” que ha recibido últimamente. Entonces, él menciona que aquella batalla pública con su hija no es lo mejor para ella.
En un texto legal, su abogado consigna: “Aunque debe impugnar esta petición injustificada para su remoción, el Sr. Spears tiene la intención de trabajar con el Tribunal y el nuevo abogado de su hija para preparar una transición ordenada a un nuevo curador”. Frente a toda esta situación, el abogado de Britney señaló ante TMZ:
“Estamos complacidos, pero no necesariamente sorprendidos, de que el Sr. Spears y su abogado al fin reconozcan que debe ser destituido. Sin embargo, estamos decepcionados por sus constantes ataques vergonzosos y reprensibles contra la Sra. Spears y otras personas”.
Hace unas semanas, reportamos que la cantante y bailarina por fin pudo elegir a su abogado. Sin dudas, aquel fue un primer paso para estar más cerca de su objetivo.