Los festivales de música con público masivo ya están de regreso en Estados Unidos, incluido el BottleRock, un evento que tiene lugar todos los años en el Napa Valley de California y que, al desarrollarse en una zona residencial, cuenta con una curiosidad: a partir de las 22:00 h debe finalizar su actividad porque desde esa hora rige un toque de queda.
A lo largo de los años que el festival se viene llevando a cabo en ese lugar, la peculiar norma ha afectado el desarrollo de sets de artistas como The Cure (2014), Foo Fighters (2017) y Neil Young (2019), a quienes recientemente se sumaron los Guns N’ Roses, encargados de cerrar la noche del sábado.
El episodio se produjo de la siguiente manera: Axl Rose y compañía se disponían a concluir su participación con “Paradise City”, el himno con el que la banda acostumbra a finalizar sus shows, y para la ocasión llamaron a Dave Grohl. Cuando llegaron las 22, la situación se tornó bizarra cuando las personas encargadas del sonido del recital decidieron desconectar al grupo.
Aunque podrían haberse enojado y abandonado el escenario, tanto los miembros de los Guns como Grohl decidieron seguir adelante con la interpretación, acompañados por un público que los secundó cantando incluso más fuerte. Por supuesto, el hecho quedó registrado en video, el cual podés ver más arriba.